- El responsable de BBVA Research, Rafael Domenech, advirtió ayer de que, si no se hace nada para empezar a garantizar la estabilidad presupuestaria a partir del año 2022, “posiblemente surjan dudas sobre la sostenibilidad de las cuentas públicas” de España. Por ello llamó a “ponerse manos a la obra” para evitar que se pueda dar “un ajuste dramático y muy rápido” en las pensiones, en cuya reforma “hay que empezar a trabajar ya”.

Domenech hizo estas reflexiones en un encuentro organizado por Deusto Business Alumni, ayer en Bilbao, que fue presentado por el director territorial norte del BBVA, Carlos Gorría, y el presidente de DBA, Agustín Garmendia. En el acto también participó el presidente del Foro de Expertos del Instituto BBVA de Pensiones, José Antonio Herce, quien instó a tomar medidas para que las pensiones sean “pagables y sostenibles” porque, “como están pensadas hoy, no se van a poder pagar”.

En su intervención, Rafael Domenech recordó que el confinamiento y cierre de actividades productivas ha provocado un descenso trimestral del PIB en el primer trimestre del 5% y se estima una caída acumulada de entre el 20 y 25% en el primer semestre.

Tras señalar que la caída del PIB en España podría situarse este año por encima del 10%, afirmó que en el país la recuperación será “más lenta” que en otras economías del mundo, porque se han adoptado medidas de confinamiento y de restricciones a la movilidad “mucho más intensas”, y a ello se añade un “mercado menos eficiente” y el hecho de contar con mucha pequeñas empresas “con menor capacidad de aguante”.

A su juicio, si la crisis tiene un impacto muy grande” sobre la economía, “también lo va a tener sobre el sistema de pensiones”, debido a la disminución de los ingresos por cotizaciones sociales, y este año aumentará su déficit, que en 2019 ya alcanzó una cifra cercana a los 18.000 millones.

Domenech advirtió de que esta crisis va a dejar unas cuentas públicas “con un déficit muy grande” y, según señaló, las previsiones, “con los gastos más recientes ya comprometidos”, posiblemente eleven ese déficit al 14 ó 15%. En este sentido, indicó que, “si no se hace nada” para empezar a garantizar la estabilidad presupuestaria a partir del año 2022, “posiblemente surjan dudas sobre la sostenibilidad de nuestras cuentas públicas”, lo que obligaría el Gobierno español a realizar “ajustes dramáticos” en las pensiones.