- El cierre de Nissan en Barcelona -que afecta solo en empleo directo a más de 3.000 trabajadores-, los anunciados despidos de Renault en todo el mundo -15.000, que parece que no afectarán a las factorías españolas- o, más próximas, la confirmación por parte de la planta de Mercedes Benz en Gasteiz de un nuevo recorte en su producción para este año, sin olvidar el ERTE que afecta a las plantas de Michelin -también a la de Vitoria- son el cúmulo de noticias que la semana pasada hacían saltar todas las alarmas en un sector, el del automóvil, que ya venía tocado antes de la pandemia del covid-19, en jaque por episodios como el denominado dieselgate y, sobre todo, por la incertidumbre que algunas declaraciones institucionales habían originado en torno al diésel -por ejemplo, en torno al 85% de la producción de la planta de Mercedes en Jundiz responde a este combustible-.

Un escenario realmente preocupante que llevaba el viernes pasado al lehendakari a reclamar al Estado y a Europa "una apuesta valiente" para defender el sector de la automoción. En esta misma línea, la ministra de Hacienda y portavoz del Gobierno español, María Jesús Montero, aseguraba que su Ejecutivo trabaja "de forma intensa" en la elaboración de un plan de impulso a la automoción, un sector "tractor" de la economía española. Entretanto, el Gobierno Vasco, a través del Ente Vasco de la Energía, presentó ayer los detalles del programa destinado a la renovación de vehículos de alta eficiencia -anunciado la semana pasada-, que duplica su dotación inicial para alcanzar un presupuesto final de 10 millones de euros, lo que permitirá doblar las ayudas del Plan Renove vasco al diésel y gasolina hasta los 2.000 euros. Esta medidas se aplicará con carácter retroactivo desde el 30 de enero de 2020 y afectará a las operaciones realizadas en la primera convocatoria de las subvenciones.

La consejera de Desarrollo Económico e Infraestructuras, Arantxa Tapia, presidió ayer una reunión con representantes de las asociaciones de concesionarios de automóviles de los tres Territorios Históricos con el objetivo de poner en común los pormenores de la ampliación de las ayudas del Plan Renove de Vehículos. Dentro de los planes de reactivación económica para paliar las consecuencias de los efectos del covid-19, el objetivo es seguir profundizando en la mejora energética del sector transporte y el ahorro contemplados en la Estrategia Energética del Gobierno Vasco, así como impulsar la necesaria reactivación de sectores clave en la economía de Euskadi, entre los que el sector transporte y de la automoción tienen gran relevancia, explicó el EVE.

Esta ampliación del Renove se produce con carácter retroactivo para todas aquellas actuaciones realizadas y facturadas a partir del 30 de enero de 2020 en las mismas condiciones establecidas en las bases, aunque se amplía la cuantía que percibirán los vehículos de carburante (gasolina o gasóleo) de alta eficiencia y con clasificación energética A, que pasarán a percibir de los 1.000 euros inicialmente previstos a un total de 2.000 euros de ayuda. También se aumentan las ayudas a los vehículos de gas (GNC y GLP), y a los híbridos no enchufables. Asimismo, se mantiene la mayor cuantía de las ayudas para los eléctricos, los híbridos enchufables y los de hidrógeno. Este ajuste se realizará a todas las ayudas ya concedidas desde el pasado mes de enero.

El Gobierno Vasco prevé también flexibilizar las ayudas a las furgonetas eléctricas con el fin de apoyar a la planta gasteiztarra de Mercedes Benz y, más concretamente, su nuevo modelo destinado al transporte de personas, "una apuesta muy importante". De este modo, eleva a 80.000 euros la base imponible máxima de los nuevos vehículos subvencionables en modelos destinados a pasajeros con siete plazas homologables a ocho, como en el caso del fabricado por la factoría de Jundiz.

Otra novedad es que los vehículos denominados de kilómetro cero podrán ser objeto de subvención en las mismas condiciones que los vehículos nuevos si cumplen los requisitos de estar en situación de primera matriculación, ser propiedad de un concesionario de vehículos, no haber recibido ninguna subvención anteriormente, y tener un número de kilómetros visible en el cuentakilómetros inferior a 100. Este programa finalizará al agotar el presupuesto o como fecha máxima el 31 de octubre de 2020.

Para que las personas solicitantes puedan percibir la ayuda es imprescindible la sustitución efectiva de los vehículos antiguos de baja eficiencia -que deberán ser achatarrados en todo caso- por vehículos nuevos de la más elevada calificación energética (A) en el caso de turismos de gasolina o gasóleo, así como aquellas furgonetas de gasolina o gasóleo con bajos niveles de emisiones GEI (Gases de efecto invernadero), o alimentados por energías alternativas, bien sean eléctricos, híbridos, de gas o hidrógeno.

La convocatoria inicial del Renove ahora ampliada e iniciada a principios de año se vio afectada de lleno por el impacto de la pandemia del covid-19 y del presupuesto total de cinco millones de euros, apenas se consumieron 700.000 euros, con 593 operaciones.