- La economía está sufriendo un desplome histórico desde que el pasado 15 de marzo el Gobierno decretara el estado de alarma sanitaria y pusiera en marcha el confinamiento de la ciudadanía para frenar la expansión del coronavirus. Tras mes y medio de encierro, la pandemia está azotando a numerosos sectores productivos de manera contundente, como los talleres mecánicos, que en Álava han visto mermados sus ingresos en un 90% de la facturación.

Aunque han sido considerados servicios esenciales desde el primer momento para garantizar la movilidad de los servicios de emergencia (ambulancias, policía,€) y del transporte de mercancías, el descenso del número de coches en circulación (los movimientos por carretera se han reducido alrededor del 90%, según datos de la DGT) ha supuesto un importante desplome para los talleres de mantenimiento y reparación de vehículo, un sector que cuenta con 190 negocios en Álava que dan trabajo a alrededor de 800 personas.

Actualmente, más del 60% de estos servicios están abiertos en el territorio prestando servicio a la ciudadanía, sin recibir apenas ingresos durante estas semanas pero haciendo frente a numerosos gastos. Atienden urgencias de vehículos considerados esenciales durante el estado de alarma tales como transporte de mercancías, ambulancias, vehículos sanitarios, etc. Y también prestan servicio a aquellos vehículos de particulares que están autorizados a desplazarse por motivos de trabajo.

"En muchos casos, los talleres mecánicos han tenido que solicitar ERTEs para reducir la plantilla y adaptarse al volumen de trabajo real. La baja movilidad en las carreteras durante estas semanas y la limitación de casos que pueden atender son las causas principales de la caída tan notable de la facturación de los talleres, de hasta un 90% en la mayoría de los casos", explica Conrado Bernal, gerente de Adeada, la Asociación de Empresarios de Automoción de Álava. En el taller de reparaciones Auto Ahorro, situado en la calle Eibar de Vitoria, han estado atendiendo a clientes desde que se decretó el estado de alarma. "Los primeros días que comenzó el confinamiento apenas notamos una bajada en el volumen de trabajo, de hecho seguíamos teniendo la agenda llena de cara al puente del 19 de marzo, pero a continuación el parón fue muy notable", explica la responsable Ana Parra.

Como consecuencia de la caída de clientes e ingresos, este taller de más de 800 metros cuadrados y siete empleados (cinco mecánicos y dos en oficinas) tuvo que reestructurar el horario y los turnos de trabajo durante el mes de marzo, de tal manera que en el taller había dos mecánicos para atender los servicios puntuales que iban llegando, tales como vehículos de servicios imprescindibles durante el confinamiento (alguna rampa de ambulancias, vehículos de Gobierno Vasco y Ertzaintza, y transportes de empresas) y algunas coches particulares con problemas de batería.

En abril se vieron obligados solicitaron un ERTE porque la situación era insostenible sin clientes ni ingresos, de tal manera que se han quedado los dos trabajadores autónomos de la empresa para atender los servicios puntuales que llegan y para seguir con la atención telefónica directa al cliente y la tramitación de documentación. "Lo que intentamos es mantener la relación y una línea abierta con el cliente, a través de emails y llamadas telefónicas para informar de cómo evoluciona la situación", explica Ana Parra.

Según la normativa, los talleres mecánicos continúan prestando sus servicios para atender las reparaciones urgentes de los coches autorizados a desplazarse durante el estado de alarma, por lo que pueden acudir al taller aquellos conductores que necesiten el vehículo para ir a trabajar o por algún otro motivo que sea considerado de causa mayor (por ejemplo, atender a una persona dependiente).

Como no todos están abiertos, es recomendable que el conductor que tenga una avería se asegure antes de que sí van a poder reparar su coche y pedir una cita previa. "Es conveniente llamar al taller para comprobar si está abierto y en que horario está prestando sus servicios", apunta Conrado Bernal.

"Durante estas semanas la mayoría de los vehículos que han llegado al taller lo han hecho en grúa, pero si algún cliente ha traído el coche él mismo, se le proporciona un documento para acreditar que se ha dirigido al taller para solucionar una avería en caso de ser requerido por la Policía en el trayecto", explica Ana Parra del taller Auto Ahorro. De este modo actúan también en Larra Motor, ubicado en la Avenida de Santiago de Vitoria, proporcionando un certificado al cliente en caso de acudir al taller para demostrar ante la autoridades el motivo de su salida.

Días antes de comenzar el confinamiento, este taller empezó a notar que el trabajo descendía. "Hubo un bajón porque muchos clientes ya preferían esperar a traer el coche al taller una vez que terminara el encierro que estaban anunciando", explica el encargado Erlantz Larramendi. Durante las tres primeras semanas del confinamiento, el taller permaneció cerrado por voluntad propia para sumarse a la iniciativa Yo me quedo en casa. En ese periodo sólo atendieron averías puntuales de clientes que necesitaban urgentemente el coche, por ejemplo para ir a trabajar.

Este taller de dos trabajadores ha decidido mantener su horario habitual desde hace tres semanas, de lunes a viernes mañana y tarde (8.30-13.00 y 15.00-19.00) y los sábados (9.00-13.00). Durante este tiempo han atendido a clientes particulares que llevan el coche con averías y que necesitan el vehículo para trabajar o atender a un familiar dependiente o a una persona mayor.

De cara a garantizar la seguridad de clientes y trabajadores, los talleres están obligados a seguir las medidas de protección indicadas por el Ministerio de Sanidad para evitar el contagio del covid-19. Los mecánicos deben trabajar con los elementos de seguridad necesarios para evitar posibles contagios, por lo que en los talleres se han aplicado medidas de seguridad e higiene superiores a las habituales. "Los talleres están incidiendo mucho en este punto cara a garantizar la seguridad de sus clientes y la suya propia como trabajadores. Hay algunos que cuentan con productos virucidas aprobados por el Ministerio de Sanidad que están siendo usados en la desinfección de los vehículos que llegan a los talleres", explican desde Adeada.

Tanto en Auto Ahorro como en Larra Motor los empleados utilizan equipos de protección individual (EPIs), tales como guantes y mascarillas. "Estas semanas nos hemos dedicado a la compra del material de seguridad necesario, como mascarillas y guantes, porque los primeros días carecíamos de EPIs en los talleres, a pesar de ser considerados como servicios esenciales", asegura Ana Parra.

Con respecto a los coches, en los talleres emplean fundas para todo el vehículo (forran volante, palanca de cambios, asientos y alfombrillas con fundas de plástico o papel). Como medida de seguridad extra, en Auto Ahorro todos los vehículos son desinfectados con ozono, una medida que también empezarán a aplicar en Larra Motor. "Estamos a punto de recibir un cañón de ozono para incrementar la seguridad. Es un instrumento que purifica el aire del interior del vehículo y lo ofreceremos como servicio gratuito al cliente", explica Erlantz Larramendi.

Álava. Hay 190 talleres en Álava con 800 trabajadores.

Abiertos. El 60% de los talleres mecánicos, considerados servicios esenciales en el estado de alarma, permanece abierto.

Caída de ingresos. Las facturaciones se han reducido hasta un 90% de media.

El gerente de Adeada señala que esta situación incrementará la actividad en los talleres.

El responsable de Larra Motor explica que es una medida para dar una mayor seguridad.

La responsable de Auto Ahorro señala que ya han adquirido el material de seguridad necesario, tales como mascarillas y guantes.