El paro subió en 121.000 personas en el primer trimestre del año, lo que supone un 3,8% más que en el trimestre anterior, y la ocupación disminuyó de media en 285.600 puestos de trabajo (-1,4%), acusando así parte del impacto de la crisis sanitaria y de la declaración del estado de alarma a partir de mediados de marzo, según la Encuesta de Población Activa (EPA) correspondiente al primer trimestre del año. En ambos casos se trata de los peores registros de paro y empleo desde el año 2013. Solo en la segunda mitad de marzo la pandemia del covid-19 destruyó 509.800 empleos.

Al finalizar marzo, el número total de parados se situó en 3.313.000 y el número de ocupados, en 19.681.300 personas, ha informado este martes el Instituto Nacional de Estadística (INE), que destaca que, aunque los efectos del Covid-19 se empezaron a notar a mediados de marzo, varios aspectos de la EPA se han visto afectados.

Así, subraya que aunque la ocupación bajó en 285.600 personas en el primer trimestre, la cifra incluye a los afectados por expedientes de regulación temporal de empleo (ERTEs) de suspensión de contrato, ya que la metodología EPA los considera ocupados mientras dicha suspensión sea inferior a tres meses.

En cambio, señala el INE, la suspensión o la reducción de jornada de los trabajadores afectados por un ERTE, junto con la influencia de otros tipos de ausencias al trabajo, sí ha tenido reflejo en las horas efectivas de trabajo realizadas, que han disminuido un 4,25% respecto al cuarto trimestre de 2019.

Clasificados como inactivos

En cuanto al aumento del paro en 121.000 personas entre enero y marzo, el INE ve probable que muchos trabajadores que hayan perdido su empleo se hayan clasificado como inactivos debido a que no han podido cumplir con las condiciones de búsqueda de trabajo que se establece en la definición de paro de la EPA para que sean considerados desempleados.

De hecho, el número de inactivos creció en 257.400 personas (+1,6%), lo que situó el total de personas en esta condición en 16.525.900 personas.

La tasa de paro se incrementó seis décimas en el primer trimestre, hasta el 14,41%, mientras que la tasa de actividad bajó cinco décimas, hasta el 58,18%, tras reducirse el número de activos en 164.600 personas entre enero y marzo (-0,7%).

La subida del desempleo registrada en el primer trimestre es la más elevada para este periodo desde el año 2013, cuando el desempleo subió en más de 257.200 personas.

Los hogares con todos sus miembros en paro suben un 6%

Asimismo, los hogares con todos sus miembros en paro subieron en 60.700 en el primer trimestre, un 6% más respecto al trimestre anterior, hasta situarse en 1.073.800.

No obstante, en el último año, los hogares con todos sus miembros en paro descienden en 15.500, con un retroceso en términos relativos del 1,4% respecto al primer trimestre del año pasado.

Por su parte, los hogares con todos sus integrantes ocupados bajaron en 102.100 en relación al trimestre anterior (-0,95%), hasta un total de 10.696.400 hogares. Sin embargo, en términos interanuales, hay ahora 169.700 hogares más con todos sus miembros ocupados que un año antes (+1,6%).

Los hogares con al menos un activo bajaron en 2.800 respecto al trimestre anterior (-0,02%), hasta los 13,52 millones, pero en el último año han aumentado en 144.200, un 1%.

Por último, los hogares en los que no hay ningún activo subieron en 29.800 en el primer trimestre, hasta 5,24 millones, un 0,57% más que en el trimestre anterior. En el último año, estos hogares han disminuido en 22.800 (-0,4%).

La mayor destrucción de empleo temporal en 8 años

El Ministerio de Economía y Empresa ha destacado en un comunicado que los datos de la EPA del primer trimestre reflejan los efectos de la crisis sanitaria en los datos de ocupación, sobre todo en el empleo temporal, donde se produjo el mayor ajuste.

Así, el número de asalariados se redujo en el primer trimestre en 286.000 personas (-1,7%), de los que 255.300 tenían un contrato temporal y 30.700 un contrato indefinido. Es la mayor caída del empleo temporal en ocho años.

La destrucción de empleo registrada en los tres primeros meses del año se concentró en el sector privado, que perdió 280.300 empleos (-1,7%), su mayor descenso en ocho años, en tanto que el sector público registró 5.400 puestos de trabajo menos, un 0,1% menos respecto al trimestre anterior.

El número de ocupados a tiempo completo se redujo en 189.000 personas hasta marzo (-1,1%), su mayor descenso desde el cuarto trimestre de 2013, mientras que los asalariados a tiempo parcial bajaron en 96.600 (-3,3%).

En el último año el paro se ha reducido en 41.300 personas (-1,2%) y se han creado 210.100 empleos (+1%). Esta tasa de crecimiento interanual de ocupación es la menor desde el primer trimstre de 2014, mientras que la del paro es la más baja desde el tercer trimestre de 2013.

Más destrucción de empleo en hombres y en servicios

La subida del paro en el primer trimestre afectó a ambos sexos, aunque en mayor medida a las mujeres. En concreto, el desempleo femenino se incrementó en 62.900 mujeres (+3,7%), frente a un repunte del paro masculino de 58.100 varones (+3,8%). Con estos datos, la tasa de paro femenina aumentó casi siete décimas, hasta el 16,24%, mientras que la masculina subió medio punto, hasta el 12,79%.

Al contrario de lo ocurrido con el desempleo, la destrucción de empleo registrada en el primer trimestre fue menor entre las mujeres. Así, mientras que los hombres perdieron 147.400 puestos de trabajo entre enero y marzo (-1,3%), la ocupación femenina se redujo en 138.200 mujeres (-1,5%).

Por sectores, el desempleo subió en los servicios, con 172.800 parados más (+14,8%), su mayor repunte en once años, y en la industria, con 15.100 desempleados más (+9,4%). Por contra, bajó en los parados de larga duración en 32.900 desempleados; en la agricultura (-19.700 parados, -10,7%); en la construcción (-9.600 parados, -6,6%), y en el colectivo de quienes buscan su primer empleo (-4.700 desempleados, -1,5%).

Por su parte, la destrucción de empleo en el primer trimestre afectó mayoritariamente al sector servicios, que perdió 275.900 puestos de trabajo (-1,8%), su mayor retroceso desde el cuarto trimestre de 2011. Por su parte, la agricultura destruyó 9.100 empleos en el trimestre (-1,1%) y la construcción perdió 6.200 ocupados (-0,5%).

Por otro lado, los trabajadores por cuenta propia disminuyeron hasta marzo en 2.200 personas (-0,07%), lo que situó el número total de autónomos en 3.109.800 personas.