BILBAO - El presidente de la Confederación Empresarial de Bizkaia (Cebek), Iñaki Garcinuño, instó ayer una mejor definición de las horas sindicales que utilizan los representantes legales de los trabajadores en las empresas vascas porque, en su opinión, son “un eufemismo y un coladero para no trabajar”. Estas afirmaciones en una entrevista en Radio Euskadi soliviantaron a todo el movimiento sindical vasco que no dudó en criticar la afirmación tal y como hizo CCOO de Euskadi para el que dicho planteamiento sitúa a la organización empresarial vizcaína, Cebek, en el mismo “arco argumental predemocrático y nostálgico de las fuerzas políticas de ultraderecha”.
Iñaki Garcinuño lamentó un comienzo de “año horroroso” para la siniestralidad laboral en Euskadi, incluido el derrumbe en el vertedero vizcaíno de Zaldibar aunque recordó que el pasado año los accidentes laborales graves se redujeron un 20% interanual.
El presidente de Cebek valoró el derrumbe del vertedero de Zaldibar como “tremendamente lamentable” dentro de “un comienzo de año horroroso en cuanto a accidentes laborales”. “Y este es uno más”, resaltó.
Desde su punto de vista, las indagaciones en torno a la actividad del vertedero evidencian “una situación complicada donde, seguramente, a la empresa se le tendrá que exigir un montón de información respecto a cómo se han llevado a cabo todos esos vertidos y la situación en la que se encontraba el propio vertedero, y si, realmente como parece, ya se percibía que podía haber algún tipo de problema”. “Y habrá que aclarar cómo se ha gestionado esa alarma que alguien de la empresa pudo dar respecto a algún corrimiento de tierra o ruidos previos”, precisó.
Garcinuño instó a que se deje “actuar a los técnicos del Gobierno Vasco y de Osalan, que son a los que les toca buscar esa información” y, a partir de ahí, “extraer consecuencias”. - Europa Press