donostia - El 50% de los economistas vascos considera que las entidades bancarias se plantean cobrar a los clientes por los depósitos para aprovecharse de la situación de tipos de interés negativo y ampliar sus ingresos derivados de cualquier servicio. El 24,8% cree que la medida “solo” es acertada en caso de que se aplique a clientes cuyos depósitos superen un cierto umbral.
Este es uno de los resultados del Ekonometro correspondiente a diciembre de 2019, una encuesta difundida ayer y que lleva a cabo el Colegio Vasco de Economistas dos veces al año entre sus integrantes para elaborar indicadores socioeconómicos con sus opiniones.
Además de los depósitos bancarios, los encuestados se han pronunciado sobre la situación económica del País Vasco y el 50% ha mantenido que no ha variado en los últimos seis meses. Casi el 32% cree que ha empeorado y el 18% que ha mejorado, justo a la inversa del Ekonometro anterior (junio 2019), según el cual el 33% opinaba que había mejorado y el 16,6% que había empeorado.
Respecto a la evolución del desempleo en los próximos seis meses, las previsiones también son pesimistas ya que el 40,5% cree que aumentará esta tasa, mientras que el 2% afirma que este incremento será importante y el 20,6% cree que el paro se reducirá “algo”.
Este pesimismo se extiende, asimismo, al índice de confianza respecto a la economía, que aunque positivo (1,3 sobre 100) marca el peor valor de toda la serie desde junio de 2016. Sobre la competitividad de la economía vasca, los economistas estiman que los factores que más influyen son la I+D+i (24,6%), seguida de los costes salariales (17%). El desempleo (5,9%) y el fraude (3,9%) ocupan los últimos lugares.
Preguntados por las medidas necesarias para ir hacia un modelo de economía sostenible, las dos primeras opciones elegidas por los encuestados han sido reducir los residuos plásticos hasta su eliminación (28,3%) y la necesidad de tener en cuenta criterios científicos, además de económicos, al afrontar el reto climático (28,3%). - Efe
