BILBAO - El secretario general de UGT Euskadi, Raúl Arza, no cree que sea “el momento” para la huelga general convocada para el 30 de enero por sindicatos nacionalistas y considera que responde a un interés “de acoso” al Gobierno Vasco. Por ello, afirmó ayer que “parece más el primer acto de una campaña política para las elecciones vascas que un intento serio de cambiar las cosas”.

En declaraciones a Europa Press, Arza se refirió, de esta manera a la convocatoria de huelga general registrada esta semana por los sindicatos ELA, LAB, Steilas, ESK, Hiru, Etxalde y EHNE, un paro impulsado, junto a colectivos sociales y pensionistas firmantes de la Carta de Derechos Sociales de Euskal Herria, en defensa de “un empleo, unas pensiones y una vida dignas”.

Ante esa convocatoria, Arza defendió que “no es el momento” para esta huelga con un nuevo Gobierno en España que tiene entre sus planes la derogación de la reforma de pensiones de 2013, la revisión de las pensiones de acuerdo al IPC y la eliminación del factor de sostenibilidad. “No entendemos por qué ahora”, indicó. A su juicio, la utilización de la huelga general es “inadecuada, generalista y confusa” y se dirige “contra todos y contra todo”. En este sentido, considera que responde “más a una estrategia sindical de confrontación política y de protagonismo exclusivo y excluyente, utilizando las reivindicaciones justas del movimiento de pensionistas”.

Arza cree, por tanto, que responde a “otros intereses de acoso al Gobierno Vasco”, aunque, según apuntó, la única reivindicación que se le puede hacer al Gabinete Urkullu en esta materia es que mejore las prestaciones que reciben los pensionistas a través de la Renta de Garantía (RGI). En este sentido, Arza considera que se debería abrir un debate y recordó que ya está encima de la mesa una reforma de la RGI y UGT Euskadi es partidario de introducir cambios que puedan posibilitar que más pensionistas puedan complementar su pensión con la Renta de Garantía de Ingresos. Arza agregó que esta huelga rompe la “unidad” en el movimiento de pensionistas, cuya “virtud ha sido el respeto al carácter unitario, a su pluralidad y a su diversidad”. Por ello, UGT Euskadi no quiere ser “cómplice de la fractura y la división provocada” por esta convocatoria en el movimiento de pensionistas.

Por su parte y también en declaraciones a Europa Press, la secretaria general de CCOO Euskadi, Loli García, manifestó que la huelga general es “inoportuna” y tiene “intereses” que “poco tienen que ver” con la defensa del sistema público de pensiones. Además, afirmó que el Gobierno Vasco debe “creerse la concertación social” y asumir que los sindicatos son “buenos” para modificar las políticas públicas.

La líder de CCOO Euskadi insistió en que la huelga general del 30 de enero carece “de sentido”, especialmente tras haberse conformado el nuevo Ejecutivo central. Según recordó, “cuando se realiza una convocatoria de huelga, tiene que haber un interlocutor, y en el día que se convocó no lo había”. “Ahora lo tenemos. El Gobierno de coalición tiene un acuerdo de Gobierno que recoge una parte importante de las reivindicaciones de la plataforma de pensionistas. Hay una intencionalidad muy clara de llevar eso por un camino, que es lo que veníamos reclamando nosotros y el movimiento de pensionistas, del que somos parte”, explicó García. - E.P.