bilbao - La secretaria general de LAB, Garbiñe Aranburu, anunció ayer que la vuelta del verano “va a estar marcada en Euskadi por más conflictividad y movilización sindical y social” porque los indicadores que se perciben en las empresas y los conflictos laborales abiertos están demostrando que “la reactivación de las luchas sindicales no es algo coyuntural sino que marca una tendencia”.
Aranburu hizo este anuncio durante la presentación en Bilbao del informe de acción sindical de LAB durante el curso que ahora concluye donde el sindicato ha estado presente en 133 conflictos laborales, frente a los 120 del curso anterior, de los que se llegó a convocar huelga en 65 conflictos, y paros parciales en otros 23, el 66% del total, frente al 54% de hace un año. De los 133 conflictos contabilizados, 63 se han cerrado con resultados, y los 70 restantes siguen abiertos. Asimismo 114 fueron conflictos a nivel de empresa y 19 a nivel sectorial.
La secretaria general de LAB explicó que tras el verano van a apostar por “ir más allá de la unión sindical y buscar alianzas con movimientos sociales para ampliar la acción sindical por toda la dinámica de reclamaciones sociales que se están dando entre colectivos como pensionistas, feministas, jóvenes o migrantes”, señaló. - DNA
