Donostia - En Gipuzkoa hay varios sectores importantes en lucha y dos de ellos, el papel y las artes gráficas, van de la mano. Manu Odriozola es trabajador de este último y ha participado activamente en las dos primeras jornadas de huelga organizadas en el sector los pasados miércoles y jueves. De hecho, mientras atiende a este periódico por teléfono se encuentra participando en un piquete informativo.

“La fuerza de los trabajadores está en la unidad”, declara el guipuzcoano, que se presenta como miembro de Ezker Iraultzailea y afiliado de LAB. Forma parte de un sector con tradición de lucha, unos 1.500 trabajadores, que están llamados a ocho días de huelga por la mejora del convenio. LAB, ELA y UGT reclaman una subida del IPC más el 2,75% para 2019 y 2020, una reducción de la jornada anual 16 horas, la vigencia indefinida del convenio para “quitarnos la amenaza del convenio estatal” y mejoras en prevención e igualdad.

Odriozola señala que por ahora la patronal guipuzcoana ha ofrecido subidas similares al IPC, por lo que no cree que vaya a haber acuerdo en la reunión del 2 de julio. “Debemos unirnos todos los sectores en lucha”, valora el de Anoeta, que recuerda que sus huelgas coinciden con los 16 días de paro convocados en el papel. “Es muy positivo”, afirma, y remarca “el ejemplo” que suponen los trabajadores del metal de Bizkaia. “Es necesario que todos los trabajadores nos movilicemos unidos. Es más, creo que es necesaria una huelga general en Euskal Herria. La patronal es la misma para todos”.

¿Cómo se vive anímicamente una situación así? “Estamos animados. Tenemos que apoyarnos unos a otros y, en los momentos duros, pensar que estamos intentando mejorar las condiciones de trabajo de todos y, en última instancia, cambiar la sociedad”. - A.L.