berlín - Los pedidos de las fábricas alemanas registraron el pasado mes de febrero un retroceso del 4,2% respecto del mes anterior, cuando ya habían bajado un 2,6%, lo que representa la mayor caída de los encargos del sector industrial desde enero de 2017 a raíz del fuerte descenso de la demanda internacional, según los datos publicados ayer por la Oficina Federal de Estadística (Destatis).

En comparación con febrero de 2018, los pedidos de la industria alemana -el principal cliente de los exportadores vascos- experimentaron un retroceso del 8,4%. “La fuerte caída de los nuevos pedidos claramente socava los recientes signos tentativos de un rebote de la actividad global en el primer trimestre de 2019”, admitió Carsten Brzeski, economista jefe de ING Alemania, advirtiendo de que estos “horribles” datos apuntan a que la industria alemana aún se ve afectada por la incertidumbre sobre el Brexit y otros riesgos globales, por lo que “debería prepararse para más malas noticias”.

Según Destatis, los pedidos domésticos bajaron en febrero un 1,6% respecto a enero, mientras que los pedidos internacionales cayeron un 6%. Los nuevos pedidos procedentes de la zona euro disminuyeron un 2,9% en comparación con enero, pero los encargos por parte de otros países cayeron un 7,9% mensual.

En el mes de febrero, los pedidos de bienes intermedios cayeron un 0,9% en relación con el mes de enero, mientras que los fabricantes de bienes de consumo vieron caer los pedidos recibidos un 3,5%. - E.P.