La asociación de mujeres pensionistas Oneka transmitió ayer a la directora del Instituto Vasco de la Mujer Emakunde, Izaskun Landaida, su preocupación por la violencia machista que sufren las mujeres mayores y por la menor cuantía de sus prestaciones en comparación con los hombres.

Por su parte, Landaida trasladó al colectivo de mujeres pensionistas su intención de realizar un estudio sobre la brecha de género en las pensiones, un problema que, según algunos estudios, implica que la pensión media que reciben las mujeres en Euskadi sea en torno a un 40% inferior a la de los hombres.

Una delegación de la plataforma Oneka, que se presentó en sociedad el pasado octubre en Donostia, celebró en Gasteiz un primer y “fructífero” encuentro con Landaida en el que le han explicado que comparten las reclamaciones de las asociaciones de pensionistas “mixtas”, a las que ellas añaden demandas “específicas” sobre mujeres.

En declaraciones a los medios tras el encuentro, Ana Meso precisó que el colectivo de mujeres mayores tiene “problemas muy claros”, como la violencia machista y en ocasiones también las agresiones por parte de los hijos.

Otro problema es la “tremenda” diferencia en la cuantía de las pensiones respecto de los hombres derivada de que los salarios han sido también distintos, una circunstancia que se agrava en el caso de las amas de casa, que “igual no han cotizado pero que con su trabajo han ahorrado dinero a las arcas públicas”.

Sobre la cuantía de las pensiones Oneka valora que el Gobierno vasco quiera subir este año un 2,25% la Renta de Garantía de Ingresos (RGI), lo que beneficiará a los pensionistas con las prestaciones más bajas, que verían aumentado en ese porcentaje el complemento que perciben. No obstante, reclaman que se “refuerce” la pensión en sí misma -que depende del Ejecutivo central- y no los complementos, con el objetivo de garantizar una cantidad digna a las personas mayores, que los jubilados vascos cifran en un mínimo de 1.080 euros mensuales.

Oneka, una plataforma feminista que también está participando en la organización del 8 de marzo de este año, acordó con Emakunde seguir colaborando e intercambiando información a partir de ahora en adelante, precisó Meso.

La directora de Emakunde tiene previsto reunirse con otros colectivos de mujeres pensionistas en las próximas semanas. Así, mantendrá encuentros con agrupaciones como la plataforma de jubiladas y pensionistas, y la Federación de asociaciones mujeres viudas.

El Instituto Vasco de la Mujer subrayaó la importancia de “trabajar para garantizar la autonomía económica de las mujeres y para reducir la brecha salarial”. - Efe/E.P.