madrid - Los líderes de CCOO y UGT, Unai Sordo y Pepe Álvarez, anunciaron ayer que se movilizarán el próximo 8 de febrero en un “gran acto sindical” en Madrid para exigir al Gobierno a que derogue determinados aspectos de la reforma laboral de 2012. “Es el momento de concretar, de ejecutar medidas para la igualdad, para recuperar derechos y salarios”, manifestaron ambos líderes, quienes instaron al Ejecutivo de Pedro Sánchez a que “mueva pieza y que no se escude en minorías parlamentarias” y lleve “al BOE” aquellas reformas en las que ya están de acuerdo, “aunque la CEOE no lo esté”.
A esta gran asamblea, que movilizará a más de 10.000 sindicalistas, le seguirán otras que culminarán con un paro laboral de 2 horas para todos los trabajadores el próximo 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, “en una jornada de lucha feminista desde una dimensión laboral”.
Ambos líderes recordaron que, al acuerdo sobre negociación colectiva firmado el año pasado con la patronal para elevar los salarios hasta un 3% y situar el salario mínimo en convenio en los 14.000 euros anuales, se suman las que llevan meses manteniendo ambas partes con el Gobierno en diálogo social. En esas negociaciones, el Ministerio de Trabajo y los sindicatos alcanzaron un preacuerdo para restablecer la ultraactividad (vigencia ilimitada) de los convenios colectivos y la prevalencia del convenio sectorial sobre el de empresa.
Este principio de acuerdo, que también incluía la recuperación del subsidio para mayores 52 años y la limitación a la subcontratación con la obligatoriedad de que las empresas auxiliares adopten el convenio sectorial o el de la empresa principal, es el que ambos sindicatos piden al Gobierno que saque adelante cuanto antes, pese a la postura de la patronal. “No queremos que el Gobierno otorgue a la CEOE el derecho de veto”, dijo Sordo, porque si la patronal no quiere suscribirlo, “está en su derecho, es legítimo, pero no puede decir que se le ha excluido” de la negociación.
El líder de CCOO pidió al Gobierno que presente un Decreto Ley que entre en vigor de manera inmediata, para después tratar de ser convalidado en el Congreso, aunque no descarta que finalmente deba seguir un trámite parlamentario.
En ese escenario, Álvarez mostró la disposición de las organizaciones sindicales para “trabajar y presionar a los grupos” que están de acuerdo con estas propuestas y que apoyaron la moción de censura, para que “no duerma el sueño de la mesa del Congreso”. “No vamos a aceptar argumentos utilizando a otros como excusa”, dijo Álvarez, quien no obstante reconoció que no puede exigir al Gobierno que convierta 84 diputados en 176, pero sí “corresponsabilidad en los asuntos cerrados con Trabajo”. También reclamaron al Gobierno que dé certeza a la población en materia de pensiones, aprobando medidas para mejorar los ingresos de la Seguridad Social, llegando a un acuerdo para la desaparición del factor de sostenibilidad y para revisar las pensiones conforme al IPC, dijo Álvarez.
Junto a estas reformas, los sindicatos emplazaron al Gobierno a llevar a cabo una “lucha efectiva por la igualdad y contra la violencia de género” y acusaron de “misoginia” a algunos grupos políticos (en referencia a Vox).- Efe
La negociación colectiva. Tras el acuerdo con CEOE sobre la recomendación de una subida salarial de hasta el 3% y situar el salario mínimo en convenio en los 14.000 euros anuales, Unai Sordo explicó que ambas organizaciones han convenido que “en el próximo periodo vamos a priorizar de una forma importantísima el impulso de la negociación colectiva”.
El derecho a veto de la CEOE. En UGT y en CCOO consideran que, si la patronal de empresarios no quiere sumarse a estas modificaciones, el Ejecutivo debe aprobarlas por su cuenta. “No queremos que el Gobierno otorgue a la CEOE el derecho de veto”, defendió Unai Sordo.
Apoyo al Día Internacional de la Mujer. Los sindicatos culminarán las movilizaciones con un paro laboral de 2 horas para todos los trabajadores el próximo 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, “en una jornada de lucha feminista desde una dimensión laboral”.
Involución de algunas fuerzas políticas. Ambas organizaciones van combatir el proceso de “involución” al que algunas fuerzas políticas, en alusión a Vox, “quieren someter a las mujeres” con la excusa de recuperar tradiciones, cuando lo que buscan es “la esclavitud”, aseguró Pepe Álvarez.