Google cumplió ayer 20 años, dos décadas en las que ha pasado de ser una pequeña startup (empresa emergente) en un garaje californiano a un negocio global con infinidad de servicios distintos y que prácticamente monopoliza las búsquedas en internet.

Se calcula que el buscador online, la pieza clave y original del imperio Google, recibe el 63% de las consultas que se realizan en todo el mundo, una cifra que se dispara hasta más del 90% si se incluyen otros portales de la compañía como Google Imágenes, Google Maps y Youtube.

La empresa fue fundada en septiembre de 1998 como un proyecto de investigación de dos estudiantes de doctorado de la Universidad de Stanford (EEUU), Larry Page y Sergey Brin, quienes a día de hoy siguen siendo consejero delegado y presidente, respectivamente, de Alphabet, matriz de Google. “Se impusieron porque tenían el mejor producto, sin lugar a dudas. No fueron los primeros (en inventar un buscador), pero la calidad de sus resultados no tenía parangón en ese momento”, explicó Mark Graham, uno de los pioneros de la red y director de la Máquina Wayback en el Archivo de Internet de San Francisco.

En pocos años, Google se abriría hueco en el mercado superando a sus entonces competidores AltaVista, Yahoo!, Hotbot y Excite.com, entre otros, y se consolidaría de forma definitiva al sobrevivir al estallido de la burbuja de las puntocoms en 2000.

el imperio de mountain view Desde entonces, el imperio con sede en Mountain View (California, EEUU) ha crecido exponencialmente hasta convertirse en un negocio que el año pasado ingresó más de 100.000 millones de dólares (85.000 millones de euros).

“Si Google no se hubiese creado o no hubiese logrado el éxito que ha logrado, otra compañía probablemente lo habría hecho en su lugar”, apuntó Graham, quien aseguró que en internet “quien logra el número 1, se queda con casi la totalidad del mercado”.

Para el experto, “ya sea por cuestiones legales o económicas”, hay un claro patrón en la red que apunta a la emergencia de monopolios naturales, como también demuestran los casos de Amazon, eBay, Netflix o Facebook.

Page y Brin empezaron en el garaje de su amiga Susan Wojcicki en Menlo Park, y esta ha seguido vinculada a la empresa desde entonces hasta convertirse en la actualidad en consejera delegada de Youtube.

Para Graham, el principal problema de la inmensa cuota de mercado acumulada por parte de Google es que se ha convertido en una “fuente de verdad”.

“Cuando uno realiza una búsqueda en Google, los primeros tres resultados que aparecen son asimilados en muchas ocasiones a la verdad y a lo importante”, explicó.

“Sin embargo, hay casos en los que esas entradas no se corresponden con lo más importante o incluso con la verdad. El ejemplo más clásico es que durante muchos años si buscabas “11 de septiembre de 2001”, los primeros resultados eran teorías conspiratorias”, apuntó el experto de internet.

Para Graham, muy involucrado junto a otros ingenieros y matemáticos idealistas en los inicios de la red y los servicios online, el actual dominio casi absoluto de Google es, en parte, decepcionante.

“La idea (con internet) era dejar que mil flores floreciesen, es decir, que el poder dejase de ser vertical, que las habilidades se distribuyesen, que el conocimiento y la capacidad creativa se democratizasen. Pero las cosas no han evolucionado así”, reconoció.

Además de las búsquedas, Google también tiene un monopolio casi absoluto de los ingresos por publicidad en internet, aunque en este caso compartido con Facebook.

La publicidad online genera solo en EEUU más de 70.000 millones de dólares anuales -una cantidad superior a la generada por los anuncios en televisión- y se calcula que más del 90% del crecimiento anual recae en Google y Facebook.

Pese a este dominio abismal, Graham cree que es “razonable” pensar en un escenario en el cual en los próximos diez años Google haya perdido cuota de mercado.

“En mis experiencias pasadas he visto en muchas ocasiones a una marca dominante en un mercado a la que todo el mundo creía insuperable perder esa posición. Aol o Yahoo! son buenos ejemplos. Hoy en día casi nadie les recuerda”, remarcó el experto.

El nombre. Google surgió del término matemático googol, que es básicamente un uno seguido de cien ceros.

El origen. El primer buscador de Page y Brin se llamó BackRub (masaje de espalda). Aludía al sistema de ordenamiento del algoritmo que calcula el total de back-links o la cantidad de páginas que enlazan con un determinado sitio web mediante vínculos.

El dominio. El 15 de septiembre de 1997 se registró el dominio Google.com. También dominios con errores, como Gooogle.com, Googlr.com y similares. Las dos ‘O’ son muy redondas, en alusión a los goggles, o gafas de seguridad.

El garaje. Su primera oficina fue un garaje en Menlo Park, California. Cuando se mudó a Palo Alto, un año después, la compañía tenía apenas 8 empleados.

El valor. Page y Brin consideraron, en 1999, vender su empresa y le pidieron un millón de dólares a Excite, que consideró “ridícula” la idea. Hoy Google vale 121.000 millones de dólares y es la tercera compañía más valiosa del mundo, superada por Apple y Amazon.

La matriz. En 2015 se fundó Alphabet Inc., empresa que actualmente es la matriz de Google. Su fundación surgió por el deseo de separar las líneas de negocio de sus otras compañías. Es una de las empresas que mejor paga en el mundo, con salarios entre 70.000 y 200.000 dólares.

El garabato. Los dibujos y animaciones que en ocasiones acompañan o remplazan al logotipo de Google se denominan doodles (garabatos). En 1999 se hizo el primero y fue una alusión al festival Burning Man.

Las búsquedas. Según Live Stats, cada día se hacen 3.500 millones de búsquedas en Google. Dar la respuesta en alrededor de 0,19 segundos implica el trabajo de un millón de computadores.

El verbo. En junio de 2006, el Oxford English Dictionary incluyó la palabra Google como verbo. El término no existe en la RAE.

Los usuarios. Seis productos de Google han superado los mil millones de usuarios. Además del motor de búsqueda, se trata de Gmail, YouTube, Chrome, Maps y la Play Store.

Los fracasos. Otros servicios han caído en desuso y han desaparecido, como la red Google Buzz, el álbum de fotos Picasa y Google Goggles.

Los lenguajes. El buscador de Google tiene versiones en klingon, pirata, perro, hacker... en total, 129 lenguajes.

El traductor. Google traduce casi 150.000.000.000 palabras cada día al más de centenar de idiomas que cubre.

La hegemonía A agosto de 2018, Google concentraba el 90,88% de las búsquedas a nivel mundial. Bing y Yahoo! están muy lejos, con el 3,17% y el 2,46%.