Beasain - El comité de empresa de CAF ha convocado para el próximo viernes un paro de dos horas para protestar por la muerte de cuatro extrabajadores de esta planta a causa del amianto.
El comité de esta factoría explicó en un comunicado que ya son 35 los empleados de CAF Beasain a los que “oficialmente” se ha reconocido que “la causa de su muerte” fue la manipulación de amianto. Los representantes de los trabajadores han expresado su “malestar por la actitud de las empresas implicadas” que, según denuncian, “obstaculizan” las peticiones de los enfermos y familiares de fallecidos cuando “reivindican sus derechos legítimos, como son las indemnizaciones correspondientes y el recargo de prestaciones”.
Los trabajadores denuncian asimismo la actitud “obstruccionista” de la administración a la hora de “compensar a las víctimas y dificultar la creación de un fondo de compensación económica como existe en varios países de Europa”, aunque “parece que después de mucha pelea esta petición histórica empieza a ser realidad”.
El comité de CAF Beasain ha convocado un paro el próximo viernes entre las 9.00 y las 11.00 horas y una manifestación, que partirá desde la entrada principal de la factoría y comenzará con un homenaje a los afectados por el amianto ante el monolito erigido en su memoria en la portería principal de la empresa.
Por otro lado, el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco ha condenado a Uralita a indemnizar con casi 302.000 euros a un trabajador afectado por una asbestosis pleural como consecuencia de su exposición al amianto.
Este trabajador, Fortunato M.G., que interpuso su primera demanda en 2012 y, tras diferentes sentencias que fallaron a favor de la empresa, el Juzgado de lo Social número 3 de San Sebastián le dio la razón y estableció que Uralita debía indemnizarle con 301.672 euros.
La compañía recurrió esta decisión, pero el alto tribunal vasco la ha ratificado al entender que Uralita incumplió la legislación de Seguridad e Higiene por no instalar ninguna extracción del polvo ni informar a su empleado del peligro que corría, explicó Asviamie. - DNA