BILBAO - El comercio vasco creció el pasado año un 1,7%, según el Eustat, y en el caso español, el comercio minorista lo hizo un 1,2%, con datos del INE, pero el comercio electrónico por Internet no cesa de incrementarse a cifras mucho más elevadas, en concreto de más del 20%. Y esto además de una oportunidad es un reto para el comercio tradicional que tiene que competir con gigantescas multinacionales en desigualdad de condiciones fiscales, según los comerciantes vascos. Esa percepción de la realidad es también la de un grande de la distribución comercial como es El Corte Inglés, cuyo presidente, Dimas Gimeno, apuesta por suscribir alianzas on line con grandes distribuidores europeos para poder competir con gigantes del comercio electrónico como la estadounidense Amazon o la china Alibaba.

El máximo responsable de los grandes almacenes coincide plenamente con el vasco Pedro Campo, representante de Cecobi y de la patronal española de comercio CEC, en señalar que las grandes multinacionales del e-commerce como las citadas disfrutan de una fiscalidad “absolutamente ventajosa”. Ambos ven una oportunidad en el comercio por internet siempre que se pueda competir en igualdad “fiscal y normativa”.

Dimas Gimeno en el transcurso de un encuentro organizado por la Confederación Española de Directivos y Ejecutivos (CECE) señaló que en Europa “hay que promover y participar en posibles alianzas entre distribuidores convencionales y tecnológicos y crear una plataforma europea para competir con los grandes distribuidores online. Hay que encontrar nuevas oportunidades de negocio más allá de nuestras fronteras. Hay que buscar fórmulas comunes en vez de gastar cantidades ingentes de dinero en marketplaces y hacerlo de forma conjunta, porque es un reto mayúsculo y hay que iniciar conversaciones”, aseguró el máximo responsable del grupo comercial.

Uno de las situaciones que denuncian los representantes de los comercio tradicionales vascos es que “no todo juegan con las mismas reglas en el nuevo escenario que se ha abierto en el mundo con la globalización económica y la digitalización”.

Igualdad fiscal En este sentido, el presidente de El Corte Inglés, al igual que señaló Pedro Campo en una entrevista en Deia, incidió en la “necesidad urgente” del sector de la distribución comercial de que se configure una normativa que se adapte a la nueva realidad. “Se necesitan unas reglas de juego homogéneas para que todos podamos competir en igualdad de condiciones. Y actualmente no existen, la legislación comercial española es del siglo XX y no del siglo XXI”, destacó Dimas Gimeno.

Donde el presidente de El Corte Inglés fue más allá de las reivindicaciones de los comerciantes vascos es cuando señaló para justificar su petición de iguales reglas para todos la existencia de limitaciones de horarios comerciales y aperturas en los diferentes territorios del Estado español.

En todo caso, Gimeno recordó que la patronal española del sector Anged “ha demandado un marco normativo moderno para competir con los grandes operadores modernos, principalmente online. Esos operadores, resaltó el presidente de El Corte Inglés, no están sujetos a la restricción de horarios, ni les afectan las normas de libertad de establecimientos y para más agravio disfrutan de una fiscalidad absolutamente ventajosa”.

De esta forma, el presidente de El Corte Inglés propone, según recoge Europa Press, “crear un marco normativo europeo que implante cuanto menos la igualdad fiscal”. “No pedimos ningún proteccionismo caduco. Pedimos igualdad normativa para que no se vulnere la libre competencia. Además, algo está cambiando, la Comisión Europea propuso nuevas reglas para garantizar que las actividades digitales sean justas”, indicó Dimas Gimeno antes de advertir que este planteamiento no es una crítica a Amazon, “una empresa espectacular”, sino una petición para que en la cuarta revolución industrial que llega de la mano de la digitalización “las reglas sean justas e iguales para todos”.

El ‘e-commerce’, aliado El presidente de El Corte Inglés aprovechó la ocasión para recordar el importante papel de la actividad comercial en el Producto Interior Bruto. Gimeno reiteró que el comercio sigue siendo un “gran motor de la economía”, ya que es un “generador de empleo y de riqueza”, pero advirtió, una y otra vez, que se tiene que adaptar a los cambios porque el comercio electrónico por internet es “un competidor y también un aliado”.

A los que achacan al comercio tradicional con una amplia red física una desventaja competitiva frente al comercio digital, Gimeno les indicó que, frente a los operadores puramente online, El Corte Inglés cuenta con una gran ventaja competitiva: una red de más de 90 almacenes con ubicaciones excelentes y que permiten tener acceso inmediato a los clientes. Estas tiendas posibilitan entregar en menos de dos horas pedidos online de un catálogo de más 200.000 referencias, cantidad que a corto y medio plazo prevén elevar a 1 millón.