BILBAO. La compañía ha iniciado este miércoles el periodo de consultas y negociación con los representantes sindicales con el objetivo de acordar una "solución satisfactoria" para todas las partes para el plan de reestructuración en España. Este proceso, según ha señalado, supone un "paso necesario" para crear una organización "más eficiente y competitiva, que garantice el liderazgo futuro de la compañía".

El plan detallado este miércoles prevé una reducción de plantilla de 272 personas en España durante este año fiscal (octubre 2017-septiembre 2018), y se engloba dentro de la reestructuración global de un máximo de 6.000 empleados en 24 países de todo el mundo anunciada el pasado 6 de noviembre.

El grupo tiene una plantilla aproximada de 4.000 personas en España, de los que alrededor de 600 trabajan en Gipuzkoa y en Bizkaia. Navarra cuenta con unos 1.500 trabajadores.

Esta medida está distribuida entre las distintas áreas de la compañía: Servicios (149), Onshore (92), Offshore (24) y Corporativo (7). Por centros de trabajo, el plan afectará en Navarra a Sarriguren (92), Orcoyen, (11) y Agustinos (4); a Madrid (78); Zamudio en Bizkaia (48); Albacete (4); Medina del Campo en Valladolid (5); Burgos (2); Santiago de Compostela en Galicia (6); Arnedo en La Rioja (4); Torremolinos en Málaga (6); Paterna en Valencia (5) y Zaragoza (7).

La compañía ha señalado que está previsto que las negociaciones se extiendan durante un plazo máximo de 30 días y ha destacado que informará de los acuerdos alcanzados "a su debido tiempo", una vez finalizadas las negociaciones.