bilbao - La recaudación fiscal continúa creciendo por encima de las previsiones a falta de dos meses para cerrar el ejercicio y el Gobierno Vasco tiene “prácticamente decidido” que no se endeudará más este año. El margen de deuda disponible ronda los 300 millones de euros y, según los cálculos del Departamento de Hacienda y Economía, se podrá prescindir de emisiones por valor de 250 millones. Sin embargo, todo apunta a que tampoco será necesario recurrir a los 50 millones restantes, de modo que la máquina del endeudamiento se desenchufa ya “casi con total seguridad”, explicó ayer el viceconsejero de Presupuestos, Alberto Alderdi

Solo habrá que recurrir a esos 50 millones si se produce un cambio radical en el comportamiento de la recaudación entre noviembre y diciembre, pero nada hace pensar que vaya a ser así. Las haciendas forales de Bizkaia y Gipuzkoa hicieron públicos ayer sus ingresos fiscales hasta octubre, que continúan en la línea de los últimos meses y en el caso vizcaino incluso superan las previsiones revisadas al alza en el último Consejo Vasco de Finanzas.

En concreto, Bizkaia ha recaudado 6.502 millones en los diez primeros meses del año, lo que supone casi un 12% más que en octubre de 2016. La hacienda vizcaina ya ha ingresado el 93% de lo presupuestado. Cumplirá con holgura el objetivo fijado para el conjunto del año -en torno a un 4% de crecimiento- e incluso está un punto y medio por encima de la nueva estimación realizada hace unas semanas. Lo cierto es que Bizkaia esperaba que el ritmo bajara en el tramo final del año y no lo ha hecho de momento. Además, aunque sobre el papel no se puede descartar que se produzca un bajón, cuestiones como el tradicional incremento del consumo y de la contratación de personal de cara a la Navidad invitan a pensar que la línea se mantendrá.

el motor vizcaino La hacienda vizcaina es el motor principal de la actividad fiscal en la CAV. Recauda más que los otros dos territorios juntos y por ello de sus arcas salen más de la mitad de las aportaciones forales que recibe el Gobierno Vasco. Así que su buena marcha anticipa un cierre de ejercicio muy positivo, sin sobresaltos y da margen al Departamento de Hacienda para no tener que volver a recurrir al endeudamiento.

Esa sensación se ve reforzada con el dato de recaudación de Gipuzkoa, que ha ingresado 3.465 millones entre enero y octubre. Esa cifra supone un 9% más que en el mismo periodo del año pasado y el doble de lo inicialmente previsto. El listón se colocó en el 10,7% en la revisión del Consejo de Finanzas y está al alcance. A la espera de conocer los datos de Araba, se puede decir que el engranaje fiscal del Gobierno Vasco está bien alineado.

En esa línea el viceconsejero de Presupuestos confirmó ayer que el préstamo de 200 millones concedido en agosto por el Banco Europeo de Inversiones se hará efectivo el año que viene. De forma paralela se ha procedido a la novación de un crédito de 300 millones que había que amortizar ahora, con lo que el endeudamiento final del ejercicio será de 1.045 millones. El límite estaba situado en 1.371 millones y se evita por tanto aumentar el saldo vivo de la deuda en algo más de 300 millones sin tener que tocar el gasto.

1.045

millones de euros será el endeudamiento que asumirá este año el Gobierno vasco. En el primer trimestre del año se solicitó un crédito por valor de 420 millones y se realizó una emisión por 100 millones. En abril se emitieron bonos por valor de 225 millones y desde entonces no se han realizado más operaciones.

Novación de crédito. Las operaciones anteriores suman 745 millones, a los que hay que añadir un crédito de 300 millones que se ha novado con el banco para aplazar su vencimiento.

El excedente presupuestario. El aumento de la recaudación y el acuerdo para renovar del cupo supondrán en torno a 655 millones extras para el Gobierno Vasco.