BILBAO - Ayer tuvo lugar la primera toma de contacto entre los trabajadores de CEL y Lucart después de que la empresa italiana se haya convertido en la única candidata por el momento a hacerse con el grupo papelero vasco. El planteamiento inicial de Lucart, con unas 40 prejubilaciones y 30 despidos, no ha gustado a la plantilla, que ha fijado como mínimo innegociable mantener todos los puestos de trabajo. En vistas de que el plan italiano pasa por incrementar la producción de forma progresiva hasta 2020, el comité propone un ERE de suspensión rotatorio entre todos los trabajadores para evitar salidas traumáticas y recuperar la normalidad cuando las fábricas vuelvan a funcionar a pleno rendimiento.
El hecho de que solo uno de los inversores interesados por CEL haya presentado una oferta aboca a una negociación para evitar la liquidación. El administrador concursal ha dado a los trabajadores hasta el próximo día 23 para aceptar o rechazar el plan de Lucart, con lo que el tiempo para negociar es escaso.
Ayer los abogados de Lucart transmitieron al comité que tienen “poco margen” para mover su oferta inicial, que pasa por arrancar la producción con solo 145 trabajadores, aunque la semana que viene continuarán las conversaciones. La firma italiana plantea hacer inversiones que alcanzarían los 20 millones en cinco años, de forma que en los próximos años se irá aumentando el nivel de producción y de plantilla.
Con esa premisa, el comité propone como fórmula para evitar salidas traumáticas la suspensión de empleo temporal de toda la plantilla de forma que todos los trabajadores se vayan rotando en el ERE hasta que el nivel de actividad permita la vuelta al trabajo de todos, probablemente entre 2020 y 2021. El comité limita el proceso al personal que quiera permanecer en plantilla, estando dispuesto a aceptar salidas voluntarias en forma de prejubilaciones, tal y como ha planteado la firma papelera italiana.
Ayer no hubo respuesta oficial de Lucart a este planteamiento, aunque los plazos fijados por el administrador obligan a que las negociaciones avancen la semana que viene. El comité también ha pedido a la empresa mecanismos para ir recuperando los salarios y que el ajuste sea menos pronunciado.
Si las conversaciones no fructifican y los trabajadores rechazan la salida de Lucart, el administrador ya ha anunciado que la papelera vasca irá a liquidación con el correspondiente peligro para el proyecto industrial. - A. L.