Bilbao - Cerca de 12.000 desempleados vascos, muchos de ellos jóvenes, realizaron el pasado año un curso de Lanbide para obtener el certificado de capacitación para el empleo, es decir, el título básico para personas sin cualificación. “Todas las personas sirven para algo, los desempleados también. Ayudarles a encontrar su hueco en la economía es nuestra labor principal”, indicó Borja Belandia, director de Lanbide. El 54% de los demandantes de empleo de la CAV tienen un nivel académico igual o inferior a la ESO, un colectivo muy amplio al que van dirigidos estos cursos para obtener una cualificación laboral básica.

El primer informe sobre cualificación en el empleo que ha elaborado Lanbide pone de relieve las carencias formativas que tiene un amplio porcentaje de desempleados vascos, que suponen un obstáculo para su reinserción en el mercado laboral. Un bajo nivel formativo que se agrava a medida que aumenta la edad. Como recogen numerosos estudios, la tasa de paro es muy superior en colectivos sin formación que en los grupos que han obtenido el bachiller y en los que tienen una Formación Profesional superior o un título universitario.

Aun así, el grupo de población con formación superior ocupa, por su elevado volumen, el segundo lugar por número de demandantes de empleo -el 48,7% de la población de la CAV ha completado un FP de grado superior o una carrera universitaria-. En tercer lugar se sitúan los desempleados con una FP de grado medio.

Belandia explicó ayer que Lanbide ha volcado sus esfuerzos en incrementar el nivel de competencias profesionales de los desempleados vascos, con un total de 724 acciones formativas en 2016 orientadas a obtener el certificado de capacitación de profesionalidad. Se trata de un mecanismo para dotar a desempleados sin estudios de una formación básica para acceder a ciertos puestos de trabajo que no demandan una alta especialización.

Sobre todo acceden a este tipo de cursos jóvenes que no han obtenido la ESO, aunque también mayores de 45 años y parados de larga duración que necesitan reciclarse para reincorporarse con rapidez al mercado de trabajo.

Un total de 11.888 desempleados vascos han realizado este tipo de cursos en 2016, de los que unos 4.700 no tenían el título de Educación Secundaria Obligatoria. En este grupo se incluyen tanto jóvenes como desempleados con años de experiencia profesional pero sin titulación que gracias a este certificado de capacitación tendrán más sencillo obtener un puesto de trabajo, según explicó Belandia.

Este documento oficial es una iniciativa de la mesa de diálogo social que pretende aprovechar la experiencia profesional con que cuentan muchos desempleados, sobre todo procedentes del ámbito de la construcción e industrial, para mejorar su nivel de cualificación y facilitar su entrada a las empresas sin tener que pasar por el ciclo académico completo correspondiente para encontrar un empleo.

Certificado de capacitación. Lanbide impartió 724 cursos en 2016 orientados a la obtención del certificado de capacitación para el empleo. Es el documento oficial básico que autoriza a parados sin estudios a desempeñar profesiones de baja cualificación. Casi 12.000 personas han obtenido esta certificación.

El director de Lanbide destacó que el objetivo es dar con el puesto de trabajo en el que cada desempleado se sienta “útil”.