vitoria - Hoy tendrá lugar el tradicional Consejo Vasco de Finanzas (CVF) de octubre, en el que diputaciones y Gobierno Vasco fijan la cifra final de ingresos del ejercicio y anticipan por dónde irá la recaudación el año siguiente. Aunque habrá un cierto frenazo en este último trimestre, en general la salud financiera de las administraciones vascas es buena y los ingresos crecerán más de lo previsto. De cara a 2018 se espera que continúe la buena dinámica aunque hay varios elementos que condicionan el cálculo. Uno de ellos es saber si la Hacienda alavesa podrá recaudar el IVA de Mercedes como hasta ahora después de que el grupo haya separado la fabricación y la comercialización de vehículos en dos empresas. El Gobierno Vasco ya mostró su optimismo sobre la posibilidad de llegar a un acuerdo con Madrid para no perder esos 200 millones y, aunque el proceso catalán ha paralizado la negociación, los números que se dibujarán en el CVF incluyen ese dinero.

Es un volumen de ingresos importante, tal y como reconocen desde el departamento de Hacienda de Lakua, que puede terminar de perfilar el margen de gasto del año que viene. Para hacerse una idea de la magnitud, hay que tener en cuenta que Araba recaudó en total el año pasado algo más de 2.000 millones de euros, con lo que se trataría del 10% del volumen de ingresos alavés, aunque el agujero se compartiría luego con el resto de administraciones de la CAV y afectaría especialmente al Gobierno Vasco.

Ese escenario no es en todo caso el que se maneja en estos momentos. Euskadi ha presentado varias fórmulas al Gobierno español para evitar que los cambios que ha hecho Mercedes resten recaudación a la hacienda alavesa y el acuerdo desde luego no es imposible. El consejero de Hacienda, Pedro Azpiazu, se mostró optimista al respecto y de hecho parecía posible que el acuerdo se cerrara en la parte final de septiembre. Los acontecimientos en Catalunya han centrado la atención del Ejecutivo español y han paralizado el asunto.

La expectativa sigue siendo la de lograr ese acuerdo con Madrid, de carácter principalmente técnico. Hasta ahora Mercedes compensaba el desajuste que generaba en la Hacienda alavesa por el IVA de las exportaciones -exentas de este tributo pero que permiten a la compañía recuperar del erario público lo pagado a proveedores- a través de las ventas de vehículos producidos en el extranjero y vendidos en el Estado español. Pero la multinacional ha activado una serie de cambios internos -la fabricación y la venta ya no dependerán de la misma empresa sino de dos filiales distintas- que harán que el sistema de ajuste actual no pueda mantenerse.

Desde Lakua se sigue reclamando al Gobierno español que acepte algunos de los mecanismos propuestos para poder dar una solución al problema, una salida pactada que ya se formuló ante una situación parecida con el IVA de Volkswagen Navarra. Hasta entonces y entendiendo que hay margen para el acuerdo -la cantidad para unos presupuestos del volumen de los españoles tiene una relevancia menor- las previsiones de recaudación del año que viene no se verán afectadas.

La previsión de recaudación de este año es de 13.500 millones, aunque la evolución apunta a una cifra que podría rondar los 14.000. Este año ha llegado a haber incrementos de dos dígitos, pero en las últimas semanas se han rebajado las expectativas y el ejercicio acabará con una subida más corta. En el CVF de hoy se fijará también un primer cálculo de los ingresos de 2018 que apuntará por dónde irán los presupuestos. Además del IVA de Mercedes, está pendiente de resolver el cambio en el Impuesto de Sociedades que negocian PNV y PSE.