gasteiz - Tras diez años de trabajo y de contactos con agentes políticos, institucionales, educativos y sociales, la Asociación de Amigos de Arizmendiarrieta/Arizmendiarrietaren Lagunen Elkartea (ALE) presentó ayer en el Parlamento Vasco un nuevo modelo de empresa basado en la participación del trabajador. Sus impulsores definen la iniciativa como un intento de llevar las bases del sistema cooperativo a la sociedad anónima, pero por el camino puede convertirse en algo más. De momento la partitura cuenta con el visto bueno de “personas muy relevantes” de la patronal vasca y a los sindicatos también les gusta cómo suena la música. ELA ha contestado formalmente a los promotores de este nuevo modelo valorándolo, salvo algunos puntos concretos, de forma positiva.

Ayer varios responsables de ALE presentaron en comisión parlamentaria las bases de su propuesta, con una buena acogida por parte de todos los grupos políticos, según explicó Juan Manuel Sinde, uno de los técnicos de ALE. Las intenciones de la asociación ligada al Grupo Mondragon pasan por contar con el visto bueno definitivo de los partidos vascos tras la ronda de reuniones que abrirán a partir de ahora para recoger las últimas aportaciones. ALE pretende que la proposición no de ley que han trasladado a la Cámara vasca se apruebe por unanimidad, aunque aun no hay fecha para ello.

Se pretende que Euskadi cuente con una guía que sirva de referencia tanto a Gobierno Vasco y diputaciones en materia fiscal como a las empresas a la hora de fijar la relación con sus trabajadores. “Que esto sea un inicio para crear un modelo socioeconómico más humano”, expone Sinde.

Este modelo inclusivo-participativo pivota en torno a la idea de la participación del trabajador en sus distintas formas como mecanismo para evitar la conflictividad. Aunque tiene ideas comundes con el nuevo modelo de empresa de Confebask, este tiene un origen diferente y también presenta divergencias. Aun así, ya ha sido compartido con personalidades relevantes del mundo empresarial vasco y ha despertado simpatía.

También ha ocurrido así entre los sindicatos, incluso en el caso de ELA, que aunque ha mostrado rechazo a algunas propuestas como la participación en los consejos de administración considera que el modelo es “un avance”, según indicó Sinde.

Al Parlamento. La Asociación de Amigos de Arizmendiarrieta (ALE) hará una proposición no de ley en el Parlamento Vasco para que Euskadi cuente con un modelo de empresa más participativo que reduzca la conflictividad.

Más humano. Con la ética cooperativa como eje, se pretende construir una empresa más humana en la que se tengan en cuenta los intereses del trabajador pero también el éxito del proyecto.