laboral - Trabajadores de CEL se concentraton ayer ante la sede de Ecofibras Aranguren, en Zalla, una de las plantas que componen el grupo, y realizaron una pegada de carteles por la comarca de Enkarterri con el fin de denunciar la situación que atraviesan después de que la dirección del grupo presentara un ERE de extinción que afectaría a 230 de los 254 trabajadores. Los trabajadores están a la espera de conocer la decisión que adopte la jueza encargada de la admisión del expediente de extinción. También están pendientes de concretar la fecha en la que se reunirán con el inversor chileno que se ha interesado por el grupo papelero, que podría viajar a Euskadi el próximo lunes. E.P.