gasteiz - El empleo volvió a ganar terreno al paro en julio pero lo hizo con menor intensidad que en meses anteriores. El frenazo se produjo tanto en Euskadi, que solo recortó en 397 personas su lista de desempleados, como en el Estado, donde salieron de la cola de los servicios públicos de empleo apenas 26.887 afectados. Son cifras muy inferiores a las de hace un año -2.961 en la CAV y 83.993 en España-, si bien la tendencia se mantiene y las perspectivas siguen siendo positivas en el mercado laboral.

Euskadi tiene a día de hoy un paro registrado de 130.872 personas, casi 10.600 menos que hace un año y, pese a la asignatura pendiente de la calidad del empleo, todas las previsiones apuntan a que el año se cerrará con una importante reducción del desempleo. En el caso del Estado, el número de parados inscritos en el Sepe, el antiguo Inem, baja hasta los 3.335.924, cerca de 347.000 menos que hace un año.

El comportamiento de Bizkaia ha sido clave en la fría evolución del empleo en la CAV, que se asemeja al mal arranque meteorológico del verano. El territorio vizcaino fue el único en el que aumentó el paro en julio ya que 183 personas (+0,24%) se apuntaron a Lanbide, mientras que mejoraron Araba y Gipuzkoa, con una tímida evolución de en torno al 1%. El sector servicios de Bizkaia fue el que mayor debilidad mostró.

El 93% de los contratos firmados en Euskadi en julio -81.149- eran temporales. O lo que es lo mismo, solo 5.567 fueron indefinidos. Además, se han registrado 12.555 contratos menos que en junio. Son algunas de las pinceladas que conforman el cuadro de la precariedad, que se completa con cuestiones como el elevado paro juvenil o la mayor exposición de las mujeres y de los mayores de 45 años al drama del desempleo.

menos afiliados En relación a la afiliación a la Seguridad Social, la otra vertiente de las estadísticas de empleo, el sistema perdió en julio 2.427 cotizantes vascos. ¿Cómo es posible que se reduzca el paro y al mismo tiempo descienda la afiliación? En principio, este tipo de situaciones se producen cuando hay más jubilaciones que contrataciones. De modo que cabe interpretarse como una consecuencia del envejecimiento de la población, que es un auténtico quebradero de la cabeza a la jora de cuadrar los recursos del sistema público de pensiones con el bienestar de los que se retiran.

También se produce un desajuste entre la evolución de las contrataciones y la del paro cuando el colectivo sin empleo anterior no ve las condiciones necesarias para buscar un trabajo o cuando las personas que se quedan sin el suyo deciden no apuntarse al paro.

Entre los que toman esa última decisión están los que saben que recuperarán su empleo en unos meses -ocurre habitualmente en el ámbito educativo- y no quieren consumir la prestación. También hay quien decide abandonar el mercado laboral y dejar de estar inscritos en el servicio de empleo una vez agotadas las ayudas porque no tienen expectativas laborales, una práctica que sobre todo está muy generalizada entre los inmigrantes, que vuelven a sus lugares de origen.

Pese al paso atrás de julio, Euskadi cuenta en estos momentos con 931.018 afiliados a la Seguridad Social, lo que supone un salto de 18.632 cotizantes en relación a hace doce meses. Aunque en menor medida, en el Estado también se notó el enfriamiento del mercado laboral. La afiliación media creció en 56.222 nuevos trabajadores en julio, una cifra modesta para un mes en el que la campaña turística ya está en marcha. Al parecer, el sector ha adelantado las contrataciones por las buenas expectativas y se han lastrado las contrataciones de julio. No obstante el incremento de cotizantes del mes pasado permite elevar la ocupación hasta los 18.489.329 millones de personas, el nivel más alto desde 2008.

Son las referencias que ha dejado la crisis, que queda cada vez más lejos. Buscando ese horizonte y volviendo a los datos del paro y a Euskadi, 10.592 vascos han abandonado las listas de Lanbide en los últimos doce meses.

La mayoría de ellos, más de la mitad, son trabajadores del sector Servicios, que sigue liderando la reducción del paro. La novedad es que la Construcción consolida su recuperación y, con 2.173 parados menos que hace un año, pasa a ser la segunda actividad económica que más reduce su desempleo. Supera de este modo a la industria y se acerca al final de su ajuste laboral, como le ocurre al resto de sectores y el tono general es cada vez más positivo.

Echando la mirada atrás, el bache del mercado laboral de julio se ve de otro color. El momento más crítico de la crisis se produjo en el primer trimestre de 2013, cuando Lanbide rozó los 180.000 parados, casi 50.000 menos que ahora.

Evolución por territorios. Bizkaia fue el único herrialde en el que aumentó el paro el mes pasado respecto a junio.

var. paro parados

Araba-20521.195

Bizkaia+18375.534

Gipuzkoa-13634.143

Total CAV-397130.872

Evolución por territorios. Gipuzkoa se quedó al margen de la perdida de afiliados gracias al empuje turístico, pero Bizkaia y Araba dieron un paso atrás.

var. afiliación afiliados

Araba -987152.706

Bizkaia -3.107463.767

Gipuzkoa+1.666314.545

Total CAV-2.427931.018