BILBAO. Representantes de ELA han mostrado su preocupación en Bilbao por la delicada situación de algunas empresas industriales como las plantas de Edesa Industrial, con sede en Arrasate, el fabricante de muebles guipuzcoano Xey, el grupo papelero CEL, el astillero La Naval o la planta de General Electric de Ortuella, cuyo cierre se ha anunciado.
El sindicato evidencia que se trata de empresas con situaciones diferentes: de "deslocalización directa" en el caso de General Electric, de problemas de liquidez a corto plazo en empresas "viables" como CEL o Xey o de un plan industrial "basado en mentiras" como en Edesa Industrial. En el caso de La Naval, la central opina que su futuro se vio "comprometido" desde la privatización.
Para ELA, la consejera de Desarrollo y Competitividad del Gobierno vasco, Arantxa Tapia, "debería dejar su responsabilidad" si no logra evitar el cierre de empresas cuyo problema fundamental es la falta de liquidez a corto plazo, ha indicado el responsable de negociación colectiva y política industrial de ELA, Peio Igeregi.
El sindicalista, que ha afeado a Tapia que se haya "negado" a reunirse con el sindicato y ha insistido en mantener un encuentro, ha considerado que el cierre de empresas "responde a una política industrial equivocada".
Según ha criticado, "venden nuestro país como si fuese un territorio low-cost y envían de viaje al diputado general de Bizkaia para ello. Han creado un paraíso fiscal para atraer multinacionales desalmadas", que en cualquier momento "deciden marcharse" en busca de mayores beneficios y mientras tanto "chantajean con las condiciones de trabajo".
A su juicio, la actitud de la consejera Tapia es "inaceptable" y sus palabras están "llenas de cinismo" al acusar a algunos inversores de huir de las empresas.
Para Igeregi y su compañero Unai Martínez, responsable de la federación de Industria y la Construcción de ELA, "es el propio Gobierno Vasco el inversor que ha huido" y ha dado la "espantada" hace dos meses en CEL, donde tenía una participación del 40 %, mientras sigue siendo accionista de Xey.
Tras una década de "desindustrialización", el proceso ha sido acentuado en la Margen Izquierda vizcaína y las Encartaciones, por lo que el mantenimiento de CEL, con plantas en esta última comarca y más de 300 empleos, es "imprescindible" para su futuro, según ha incidido la responsable del metal del sindicato en la zona, Mari José Viso.
Los representantes de ELA han censurado también que en los últimos años empresas con accionariado vasco, en algún caso nacidas con impulso público, hayan pasado a manos de compañías extranjeras (Gamesa, Euskaltel, ITP, Cementos Lemona, Naturgas...) con el "aplauso" de la consejera Tapia, a la que han acusado de hacer "mucha propaganda" y "dar por buenos los planteamientos patronales".
El responsable de Industria ha denunciado que determinados proyectos empresariales se basen en mentiras y que se "culpe" en situaciones de dificultades a los salarios y las condiciones laborales.
Ha censurado, en este sentido, que en procesos concursales, el administrador, procedente del mundo de la empresa, no exija responsabilidades por una mala gestión empresarial.
Los representantes sindicales, que han advertido de que ELA "no va a acompañar los cierres" y "va a luchar", han reclamado otra política industrial en la que se aumente la inversión pública en los sectores estratégicos y se aseguren unas condiciones de trabajo dignas.
ELA considera que es necesaria una entidad financiera pública que se implique en la política industrial y considera que Kutxabank debiera tener un papel para asegurar la supervivencia de ciertas empresas. Opina, en este sentido, que la privatización de Kutxabank es "muy grave" y su decisión de desinvertir de empresas vascas, "muy preocupante".