BILBAO - El grupo papelero CEL, la antigua Virtisú, “interesa a algunas empresas e inversores” afirmó ayer el diputado de Desarrollo Económico y Territorial de Bizkaia, Imanol Pradales, a la vez que aseguró que la Diputación vizcaína está dispuesta a colaborar para que el grupo pueda reiniciar la actividad industrial en cuanto los tribunales designen al administrador concursal.
Imanol Pradales se refirió a la complicada situación de la compañía en el pleno de control de las Juntas Generales de Bizkaia, en respuesta a una pregunta del portavoz de EH Bildu, Josu Unanue, respecto a la actuación que va a llevar a cabo la Diputación ante la situación del grupo CEL Technologies & System.
Durante la celebración del pleno de control, que se celebró en la Casa de Juntas de Abellaneda, trabajadores del grupo, con plantas en las localidades vizcaínas de Güeñes y Zalla y en la alavesa de Artziniega, se concentraron en el exterior.
Pradales afirmó que el grupo presentó el pasado 21 de junio la solicitud de concurso voluntario en el Juzgado de lo Mercantil de Gasteiz y que la Diputación está a la espera de conocer el nombramiento del administrador concursal. Aseguró que la Diputación esperará al nombramiento para “colaborar en que se puedan dar condiciones en las que sea posible reiniciar la actividad industrial lo antes posible” y para “llegar a un convenio con los acreedores” del grupo.
En todo caso, Pradales destacó que la Diputación ya ha mantenido contactos con “algunas empresas o inversores que han mostrado su interés por el grupo” y que han solicitado “disponer de información detallada sobre su situación actual con el fin de analizar cualquier opción futura”.
La Diputación Foral de Bizkaia, según Imanol Pradales, tiene “abiertas todas las vías de diálogo” con el Gobierno Vasco, los ayuntamientos de Zalla y Güeñes, comité y la dirección del grupo para “colaborar en la búsqueda de una solución”. - A. A.