BILBAO - La confianza de los hogares vascos ha entrado en valores positivos por vez primera desde 2014, debido a la “positiva expectativa” de la evolución del empleo. Sin embargo, este mayor optimismo no se refleja en la expectativa de la economía del hogar, que mantiene valores negativos, al igual que la capacidad de ahorro.

Ambas conclusiones se incluyen en el informe sobre la confianza de los consumidores vascos elaborado por Laboral Kutxa, correspondiente al segundo trimestre de 2017, elaborado con encuestas a 807 personas realizadas entre el 15 y el 26 de mayo.

El informe, que sondea la opinión de los hogares vascos sobre la evolución socioeconómica general en el próximo año, refleja una recuperación de la confianza, que entra en valores positivos (+5) por primera vez desde 2014. Además, supone un avance de ocho puntos respecto al trimestre precedente (-3). Este comportamiento es compartido con los hogares del Estado (+2) y Alemania (+3), pero no con el conjunto de la UE-28 (-3).

El informe considera que estos valores demuestran que, a lo largo de 2015 y 2016, “se ha ido recuperando la confianza de los hogares vascos”, que se aleja “definitivamente” del pesimismo mostrado en 2014, “justificado por un escenario en crisis”. Según el estudio, la confianza de los hogares vascos consolida su recuperación “gracias a la positiva expectativa de la evolución del empleo” con un valor de 23 (13 puntos más), con lo que “encadena nueve trimestres en positivo”. A ello, se suma la importante mejoría en la expectativa de la evolución de la economía general que entra en valores claramente positivos, con un valor de 12 (15 puntos más). - E. P.