bilbao - El salto de Unai Sordo a la dirección estatal de CCOO ha abierto un proceso interno para decidir quién le sucederá al frente del sindicato en Euskadi. Según explicó el propio Sordo ayer en la presentación del Congreso que se celebrará los días 1 y 2 de junio en Gasteiz, la idea es elegir para la Secretaría General un candidato que genere “un amplio consenso”. Todo apunta a que será una candidata, ya que de momento hay cuatro nombres sobre la mesa de los que tres mayoría son mujeres. Se trata de Mari Cruz Vicente, Loli García y Garbiñe Espejo, a las que se suma la opción de Alfonso Ríos.

Será el próximo lunes cuando se decida quién releva al bilbaino Unai Sordo al frente de CCOO-Euskadi, quien por su parte será elegido, salvo sorpresa, para dirigir el sindicato a nivel estatal en el Congreso confederal que tendrá lugar entre el 29 de junio y el 1 de julio. En lo que respecta a Euskadi, se desconoce de momento quién tomará el mando del sindicato, aunque parece que hay un puñado de candidatos mejor posicionados. Como explicó ayer Sordo, la dirección maneja cuatro posibles candidatos, de los que tres son mujeres.

A expensas de conocer la decisión que tome el sindicato la semana que viene, que estará condicionada también por la composición del nuevo equipo que tenga previsto configurar Sordo en Madrid, las mujeres más próximas al secretario general en la actual comisión ejecutiva son Mari Cruz Vicente, que habitualmente ejerce de número dos de la central vasca y acumula años de experiencia en la negociación colectiva, y Loli García, responsable de Formación y por lo general representante del sindicato en las mesas de diálogo social.

Según explicaron fuentes de la central vasca, también está en la lista Garbiñe Espejo, quien se prodiga menos públicamente y en la comisión ejecutivo figura como vocal. Espejo también lidera las tareas de comunicación de la federación de Industria.

Asimismo, hay un cuarto aspirante, en este caso un hombre, a suceder a Unai Sordo. Se trata de Alfonso Ríos, que dirige la secretaría de Salud Laboral, un área tradicionalmente de mucho peso dentro de la organización.

recuperar el crecimiento Según explicó Sordo, el sindicato espera lograr “un amplio consenso” sobre sus nuevos órganos de dirección, así como “en disposición de recuperar la senda de crecimiento afiliativo y representativo” con vistas a volver a situarse como segundo sindicato de la CAV por delante de LAB.

En ese sentido, “la remontada de la afiliación se está dando ya con pasos pequeños pero continuos”, indicó la central, que remarcó el incremento experimentado por el colectivo de mujeres, que han pasado de representar el 37% al 40% del total de afiliados.