MADRID - El ministro de Hacienda y Función Pública, Cristóbal Montoro, defendió ayer que no subirá el IVA ni ningún otro tipo de este gravamen: “Los organismos internacionales -como la Comisión Europea, el FMI o la OCDE- que recomiendan a España subir el IVA no tienen razón”, aseguró. Según Montoro, la recaudación de este tributo alcanzó el año pasado los 64.000 millones de euros, lo que permitió garantizar la capacidad de hacer políticas sociales.

Durante unas jornadas financieras organizadas por El Mundo y Expansión, El ministro explicó sin embargo, que hay que plantear el futuro de otras figuras tributarias, aunque no detalló cuáles ni en qué términos. Asimismo, destacó que España no ha tenido “nunca” un Impuesto de Sociedades como el actual, con un tipo nominal del 25%, ni tampoco un IRPF como el existente en este momento.

El ministro reiteró que el déficit fiscal del año 2016, cuya cifra definitiva comunicará el Gobierno a Bruselas esta semana, se redujo por debajo del 4,6%, situándose en el 4,33% si se descuentan las ayudas financieras, lo que ha sido “perfectamente compatible” con un crecimiento económico del 3,2% y supone una disminución de cinco puntos desde el 9,3% de 2011.

objetivo de déficit De cara al déficit de 2017, Montoro apuntó que los PGE tienen que contemplar una bajada del déficit público hasta el 3,1%, algo que ve “completamente factible, alcanzable y conseguible” en un escenario económico “alto y positivo” con creación de empleo.

Eso sí, insistió en la importancia de seguir reduciendo el gasto público “en términos relativos, no absolutos”, para que pierda peso en el conjunto del PIB, y seguir utilizando la recaudación e introduciendo estímulos en impuestos que favorezcan al crecimiento económico y la creación de empleo.

Además, se mostró “optimista” sobre el futuro económico del Estado, porque “España está viviendo una recuperación económica posiblemente de las más sanas de su historia”, gracias al superávit por cuenta corriente y también a que “todo el crecimiento se está yendo a empleo”, por lo que confía en que se puedan crear entre 400.000 y 500.000 empleos al año y poder alcanzar el objetivo de 20 millones de ocupados en 2020, lo que supondrá “dejar atrás el peor legado de la crisis económica, que ha sido la destrucción de empleo”. - Europa Press