El BBVA está centrado en su digitalización, una realidad que está creciendo día a día, según señaló su consejero delegado Carlos Torres. Así, las ventas digitales de productos financieros del banco en España están incrementándose de manera notable. “Hemos pasado del 8% en 2016 al 17% en ventas digitales”, recalcó Torres, y esta evolución es extensible a toda la red “todos nuestros bancos han pasado de un porcentaje inferior al 10% al 15-20% en todos los casos, menos en uno”, indicó el número dos del banco vasco en el transcurso de una conferencia coloquio celebrada ayer en Bilbao organizada por la asociación de exalumnos de la Deusto Business School, con la colaboración de Ernst & Young y que contó con una nutrida presencia de unos doscientos directivos de empresas vascas y antiguos estudiantes de La Comercial.
El consejero delegado de BBVA pasó revista a la importancia de la estrategia digital en el banco y señaló que en este campo una de las prioridades de la entidad financiera es desarrollar nuevos modelos de negocio. “No queremos esperar a que las startups o las fintechs sean las que reinventen las piezas de la cadena. Nosotros también queremos hacerlo”.
Carlos Torres reconoció que la digitalización y la automatización de la vida va a producir un profundo cambio en la sociedad pero opinó que es un cambio imparable y que va a afectar al empleo pero dejó claro que “no se puede dejar de hacer algo porque destruya empleo”. Eso sí, el consejero delegado del BBVA reconoció que otro problema es el del reparto de la riqueza y señaló que habrá que hacer algo porque posiblemente “el auge del populismo tiene que ver con el hecho de que la sociedad no ve un reparto adecuado de la riqueza”. Respecto a las perspectivas para este año, Torres se mostró optimista en los principales mercado donde opera el banco en el mundo, incluidos dos tan cuestionados, por unas u otras razones, como México y Turquía, a pesar de las incertidumbres políticas por las elecciones en Europa o la nueva administración Trump en Estados Unidos.
Aunque ha habido un frenazo en la economía mexicana tras la llegada de Trump, Torres mostró un “optimismo claro” sobre el futuro de este país lleno de “dinamismo y juventud”. También es optimista en España, a pesar de los bajos tipos de interés que dejan un margen de intermediación de un 1,8%, “muy inferior al de Estados Unidos”, y que dificultan sobremanera el negocio. En relación a la postura de la entidad respecto a una hipotética segunda ola de concentraciones bancarias en España, Carlos Torres, se limitó a señalar que el plan del banco pasa “por su propio desarrollo orgánico” aunque no descarta tomar una posición en países que interesan si se ve alguna oportunidad. Sí admitió que en el Estado español sigue existiendo una “sobrecapacidad bancaria” pese a que “se han reducido de manera brutal el número de entidades financieras”.
Alzas de salarios El BBVA pedirá autorización a sus accionistas en la junta de hoy en el Palacio Euskalduna de Bilbao para elevar el salario fijo de sus tres consejeros ejecutivos: el presidente, Francisco González; el consejero delegado, Carlos Torres Vila y el responsable de Regulación, José Manuel González-Páramo. De esta forma, y según el Informe Anual sobre retribuciones publicado en febrero, el presidente cobraría en 2017 un salario fijo de 2,47 millones de euros, frente a los 1,96 millones de 2016. Por su parte, el sueldo fijo del consejero delegado del BBVA subiría a 1,96 millones de euros este año, desde los 1,92, en tanto que González-Páramo percibiría algo más de 830.000 euros, frente a los 800.000 del año anterior.