BILBAO - El lehendakari pidió ayer un “acuerdo interno poderoso” en Euskadi para acudir a Madrid a negociar un nuevo pacto de convivencia “de igual a igual” con España. Iñigo Urkullu participó ayer en Bilbao el I Encuentro de la Comunidad del Concierto-Gure Kontzertua, la plataforma ciudadana para la defensa y la difusión de las normas que regulan el encaje de Euskadi y Nafarroa en el Estado.

El acto se celebró justo el día en el que se cumplía el 139 aniversario de la firma del primer pacto con España y en ese contexto, el lehendakari destacó la “importancia” del “acto cívico en defensa del Concierto” celebrado en la capital vizcaína de cara alcanzar un nuevo estatus político para la Comunidad Vasca.

El discurso tuvo un fuerte carácter político. Más allá de la capacidad normativa y de recaudación en el ámbito fiscal, el Concierto es la “seña de identidad” del pueblo vasco y Urkullu quiso aprovechar la cita para sumar esfuerzos. El acto también contó con el respaldo institucional de la presidenta del Parlamento, Bakartxo Tejeria; del diputado general de Bizkaia, Unai Rementeria, y del consejero de Hacienda y Economía, Pedro Azpiazu.

Acudieron representantes de todos los partidos, entre ellos, el presidente del PNV, Andoni Ortuzar, el socialista Alfonso Gil, Maialen Uriarte (EH Bildu) Luis Eguíluz y Beatriz Marcos (PP) y Carmen Muñoz (Udalberri, la marca de Podemos en el Ayuntamiento de Bilbao). A todos ellos hizo partícipes Urkullu de la necesidad de sumar esfuerzos en defensa de una norma que casi siempre está cuestionada en España.

En esa línea, recordó la declaración institucional que suscribieron en 2015 el Gobierno Vasco y las tres diputaciones. “Todas las administraciones vascas hacemos nuestro el propósito que se refleja en este acto. Defendemos el Concierto Económico como pacto político bilateral, un exponente esencial del autogobierno y de la bilateralidad del País Vasco”, aseguró.

Urkullu añadió que el Concierto también es un “fiel exponente de nuestra historia y del hecho diferencial vasco” y que es “anterior” al proceso de constitución de España.

Desde esa perspectiva y pese a asegurar que en “su origen limitó” los derechos históricos vascos, destacó que el Concierto define el camino de la bilateralidad como vía de relación con el Estado y que ha llegado el momento de buscar un nuevo encaje para Euskadi.

Profundizar en el autogobierno “El concierto económico nos habla de unas relaciones de igual a igual y otorgo una especial importancia a este acto cívico de defensa del Concierto en este momento político. Nos corresponde saber aprovechar este momento de nuestra historia, saber tejer un acuerdo interno poderoso que nos permita actualizar y profundizar en el autogobierno vasco. Nos corresponde alcanzar un nuevo pacto desde el reconocimiento y respeto de nuestra realidad nacional, que se asiente en una relación bilateral igual a igual, con garantías de cumplimiento de lo acordado”, remarcó en referencia a las competencias que todavía no han sido transferidas a Euskadi y a los recursos presentados por el Estado contra normas forales vascas.

En esa línea, afirmó que el Concierto “une” a los vascos “en el camino de alcanzar los retos que se marcan como país”. Y uno de los principales objetivos de Euskadi es alcanzar “un pacto de convivencia en un nuevo marco jurídico político de futuro para Euskadi”.

Por ello, dijo que el Concierto es también “una apelación al ejercicio desde la responsabilidad individual en su defensa y enseñanza como seña de identidad”.

En el acto de Gure Kontzertua, también participaron sus ocho fundadores y miembros de la Comunidad, que ya está formada por 2.100 personas. Entre los que plantaron la simiente de esta iniciativa hace un año, estuvo Pedro Luis Uriarte, su cabeza visible hasta ahora. No obstante, ayer fuer el decano de la Deusto Business School, Guillermo Dorronsoro, el encargado de dirigirse a los asistentes. El objetivo era visualizar que la fuerza del proyecto son todas las personas que están detrás.

Por ese motivo, Dorronsoro advirtió de que es necesario implicar a los jóvenes en la defensa del Concierto en un momento en el que la “sociedad se ha quedado muda”. A su juicio, “vienen tiempos difíciles” por el “desconocimiento” que tiene la sociedad del autogobierno vasco. Una circunstancia que se agudiza entre los jóvenes, a los que hay que implicar en la construcción del futuro.

El decano de la DBS destacó que todos los miembros de la Comunidad tienen como objetivo “dejar un país mejor” y que el autogobierno vasco es precisamente el “mejor instrumento” para conseguirlo.