bilbao - Aunque el viento sopla en contra, Kutxabank puede lucir unos resultados muy por encima de la media del sector. El banco vasco aumentó sus beneficios un 12% el año pasado hasta 244 millones de euros gracias al incremento del número de préstamos, de hasta el 33% en el caso de las hipotecas. La entidad destaca que la “intensa actividad comercial” le ha permitido mantener el buen ritmo en un escenario complicado marcado por los bajos tipos de interés y un marco regulatorio desfavorable. Como en 2015, la mitad del beneficio del pasado ejercicio se destinará a las tres fundaciones e irá a parar “casi por completo” a la obra social que realizan BBK, Kutxa y Vital.

El banco presentó ayer los números del pasado año en un encuentro con medio millar de consejeros y directivos. El presidente, Gregorio Villalabeitia, hizo un balance positivo del que ha sido el quinto ejercicio desde la fusión de las tres cajas, destacando el mérito de poder incrementar beneficios de forma notable pese al contexto adverso. El beneficio se fue hasta 244,2 millones de euros -lejos quedan los 85 millones de 2012- lo que supone seguir avanzando a un ritmo de dos dígitos, algo fuera del alcance de la mayoría de competidores. El beneficio antes de impuestos aumenta un 53% hasta 314 millones.

Este crecimiento, que se consigue además después de dejar el listón muy alto en 2015, cuando el beneficio se disparó un 45%, se asienta en una mayor actividad comercial, es decir, aumenta el número de préstamos para compensar la caída del margen por cada operación. En ese sentido, se logra aprovechar la recuperación de la actividad económica y el consumo, que se refleja en un mayor dinamismo del mercado inmobiliario. Así, el banco aumenta un 33% el número de créditos hipotecarios, mientras que las operaciones para la financiación de pymes crecen más del 10% y tocan ya niveles precrisis.

Además, la entidad atribuye los buenos resultados a una mayor aportación del negocio asegurador y al incremento del volumen gestionado en fondos y planes de pensiones, así como a la mejora de las variables vinculadas a riesgos. Los bajos tipos favorecen el que los clientes busquen productos con mayor rentabilidad. Las dos gestoras del grupo, Kutxabank Gestión y Fineco, siguen creciendo y ganando cuota de mercado.

“Son unos resultados muy buenos”, señaló ante los directivos el presidente del banco, que puso en valor que por segundo año se van a destinar la mitad de las ganancias, 122 millones, a las fundaciones bancarias, que se repartirán de manera proporcional a su tamaño. Una cantidad que “les va a venir muy bien” a BBK, Kutxa y Vital para realizar su obra social, indicó Villalabeitia, que remarcó que en el caso de la fundación vizcaina una parte se destinará al fondo de reserva que debe constituir para hacer frente a posibles circunstancias adversas.

Kutxabank mejoró todos los indicadores de solvencia y pudo reducir el volumen de dotaciones respecto a 2015 lo que también reforzó los buenos resultados. “Kutxabank es la entidad de Europa que menos capital destruye en el escenario estresado previsto. Posiblemente tenemos el perfil de riesgo más atractivo de la banca europea”, remarcó Villalabeitia.