gasteiz - Las aguas sindicales siguen bajando revueltas en la planta gasteiztarra de Mercedes Benz. Ayer, los acontecimientos se sucedieron por partida doble, con la adhesión de CCOO al preacuerdo del convenio, lo que le dotará de eficacia general sobre el conjunto de la plantilla, decisión que precipitó poco después el anuncio de dimisión por parte del presidente del comité de empresa, Igor Guevara (ELA).
El pasado 24 de noviembre, con un 53,5% de los votos a favor y el 45,45% en contra, la plantilla aprobó el preacuerdo para el convenio 2016-20 alcanzado por la minoría sindical compuesta por UGT -primera central en la factoría-, Ekintza y PIM. El referéndum entre los trabajadores era un punto de inflexión en un largo trayecto de prácticamente un año en el que precisamente el modelo negociador -y la negativa de UGT a comprometerse a no firmar en minoría el convenio- había precipitado en mayo un golpe de mano en el comité que no solo supuso la destitución del entonces presidente, Iñaki de Andrés (UGT) por ELA, LAB, CCOO y ESK, sino un motivo de dura controversia entre UGT y CCOO que trascendió a las relaciones de ambos sindicatos.
Tras la votación de finales de noviembre, quedaba por disipar la duda de qué posición tomaría CCOO con respecto al preacuerdo aprobado -que contaba ya con el rechazo frontal de ELA, LAB y ESK-, en la medida en que sus votos eran determinantes para que el convenio alcanzara la condición de eficacia general, afectando a sus 5.000 trabajadores, o se quedara en eficacia limitada. CCOO había vinculado su decisión al resultado del referéndum y ayer comunicó en la reunión de la comisión negociadora del convenio su determinación de firmar el preacuerdo, si bien en una nota de prensa posterior se mostró muy crítico con UGT, Ekintza y PIM, a los que acusó de “secuestrar la negociación” y no haber querido “sumar fuerzas con el resto de sindicatos”.
CCOO argumentó su decisión precisamente en su “compromiso con la asamblea de su afiliación y con la decisión mayoritaria del referéndum de la plantilla”, insistiendo en que el preacuerdo alcanzado es “insuficiente, en un contexto en el que la producción es un 30% superior al mejor año de la historia de la fábrica, con el lanzamiento de un modelo con una aceptación inmejorable en los mercados y con una plantilla cercana a los 2.000 empleos eventuales.
En cualquier caso, CCOO consideró que al dotar al convenio de eficacia general “evitará así la presión que iban a sufrir los trabajadores firmando individualmente el futuro convenio”. “No hay más alternativas coherentes”, concluyó, para advertir que “estarán vigilantes” en las comisiones de trabajo que se constituyan.
acuerdo “roto” Poco después de conocerse ayer por la mañana la decisión de CCOO, el presidente del comité de empresa anunció su dimisión. Según explicó el propio Igor Guevara en declaraciones a Efe y Europa Press, remitió una carta a toda la plantilla en la que acusa a CCOO de “negociar a espaldas de la plantilla y del propio comité”. “Entendemos que firmar el convenio es ir en contra del acuerdo que tenía CCOO con nosotros desde el mes de febrero que consistía en respetar que la negociación tiene que ser respetando la mayorías del comité”, explicó Guevara para añadir que “no tiene sentido ser presidente de un órgano en que la mayoría de los miembros no creen y al que no respetan”. “No tiene sentido seguir al frente de un comité que no trabaja al amparo de la legalidad laboral, para buscar el beneficio de todos”, escribe Guevara en la carta remitida a la plantilla.
Para el presidente del comité, con la decisión de firmar este convenio, CCOO “da su respaldo a negociar a espaldas de la plantilla y del propio comité” porque se trata de un convenio que “no viene respaldado por la mayoría de la plantilla pese a que empresa y firmantes del mismo intentaron que fuese así, por medio del chantaje y un más que antidemocrático referéndum”.
En su carta, Guevara acusa a la empresa de trabajar “para el divide y vencerás” porque “sabe que hay sindicatos dispuestos a dejar la unidad de un lado y buscar el beneficio propio o quizás de su sindicato. En esta ocasión la empresa contaba también con la ‘carnaza del empleo indefinido’ que sabemos que es necesario para la empresa e ilegal que no lo haga. Pero a este derecho hay algunos que prefieren darle nombres y apellidos”, denuncia en la misiva.
La dimisión de Guevara se oficializará en la reunión del pleno del comité que se celebrará en enero, dimisión que se hará efectiva cuando se nombre a otro presidente.
Por su parte, UGT manifestó su satisfacción por “después de todo, y a pesar del comportamiento poco coherente demostrado por algunos representantes de los trabajadores, haya sido un convenio de eficacia general”, insistiendo en que el acuerdo alcanzado “es el mejor convenio del sector de la automoción a nivel estatal”.
Por contra, en otro comunicado, LAB lamentó que “después de semanas de indefinición sospechosa”, CCOO haya decidido respaldar un convenio “más regresivo, que aumenta la precariedad para las nuevas contrataciones, profundiza en la flexibilidad absoluta y recoge subidas salariales ridículas” y denunció que el apoyo de CCOO llega sin que el convenio incluya “ninguna mejora en su redacción que pudiera explicar mínimamente su adhesión”, por lo que “teme” que ésta se haya producido “a cambio de prebendas hacia ese sindicato que no se han hecho públicas”. - DNA/Efe/E.P.