FRáNCFORT - El Banco Central Europeo (BCE) está preparado para aumentar los estímulos monetarios en diciembre porque la inflación es muy baja en la eurozona y no da señales de estabilizarse cerca del 2%. El BCE consideró en su última reunión de política monetaria que faltaban “señales claras de una convincente tendencia alcista” en la inflación subyacente, que descuenta los elementos más volátiles como la energía y los alimentos.

Así se desprende de las actas de la reunión mantenida el 20 de octubre, antes de las elecciones en EEUU, que el BCE publicó ayer y en las que hace hincapié en que el consejo de gobierno estará en una mejor posición en diciembre para evaluar las perspectivas de inflación y la posibilidad de que se estabilice a un nivel cercano al 2 %. Los mercados prevén que el banco central europeo prolongará sus estímulos monetarios más allá de marzo de 2017.

El Banco Central del euro compra mensualmente desde marzo 80.000 millones de euros de deuda pública y privada. Anteriormente adquirió durante un año bonos por valor de 60.000 millones de euros. - Efe