donostia - “Sería imposible que el Parlamento Europeo aprobara un acuerdo que baje los actuales estándares laborales, medioambientales, de protección al consumidor, etc. Conozco las líneas rojas, y no se van a pasar”. Con esta rotundidad se expresa la comisaria europea de Comercio, Cecilia Malsmtröm, en relación a las negociaciones entre la Unión Europea y Estados Unidos para alcanzar un acuerdo de libre comercio, el controvertido TTIP en sus siglas en inglés.

Malsmtröm ha aclarado algunas cuestiones planteadas en un encuentro con la europarlamentaria del PNV, Izaskun Bilbao, al que hoy se puede acceder en su blog, en las que incide especialmente en que no se contempla en ningún momento una pérdida en los niveles de bienestar y calidad de vida de los europeos. “Discutimos estándares que son básicamente idénticos, y aquellos en los que las diferencias son muy grandes salen de la agenda”, afirma.

La responsable europea de las negociaciones con Estados Unidos realiza en esta entrevista las primeras declaraciones tras las posturas críticas manifestadas por el ministro alemán de Economía, Sigmar Gabriel -posteriormente enmendado por la canciller Angela Merkel-, y el secretario de Estado francés de Comercio, Matthias Fekl con el apoyo del primer ministro François Hollande, junto con oposiciones de grupos de extrema derecha y extrema izquierda europeos.

populismo y preocupaciones Malmström a este respecto considera que “hay mucho populismo, muchas mentiras y muchos malentendidos”, pero también “inquietudes y preocupaciones que son totalmente legítimas”, y para estas últimas se muestra partidaria de “discutir y aclararlas”. Una de ellas es la creencia de que el TTIP beneficiará a las grandes empresas, que desmiente la comisaria europea de Comercio al asegurar que las primeras “tienen gente y mucho dinero para navegar cuando es difícil”, mientras que las pymes “no tienen tiempo ni recursos” para afrontar la actual burocracia, que se simplificará en el caso de que se firme el acuerdo. “Son ellas las que ganan” y a las que se les abren “muchas posibilidades”.

También niega que este acuerdo con Estados Unidos signifique una merma en la oferta de servicios públicos, cuestión que admite que también preocupa a la ciudadanía estadounidense. En respuesta junto con el ministro de Comercio norteamericano, “hemos hecho una declaración conjunta diciendo que nada en este acuerdo forzará a los gobiernos a privatizar los servicios públicos si no quieren, será una decisión suya”.

En contestación a una pregunta planteada por la europarlamentaria jeltzale Izaskun Bilbao, Cecilia Malsmtröm advierte de que no se puede hablar de un fracaso del TTIP, porque “no fracasa un acuerdo que no existe”. Reconoce que las negociaciones son “difíciles” pero considera que “continuamente estamos haciendo progresos”. “Necesitamos tiempo”, concluye.