Bilbao - El aumento del consumo de las familias los últimos meses y la necesidad de financiación ha permitido a los bancos de Euskadi acercarse e incluso alcanzar el punto en que aumenta el saldo vivo de los créditos. Según los últimos datos del Banco de España sobre préstamos, los hogares del conjunto del Estado tenían créditos por valor de 724.111 millones de euros a finales de junio. Son 118 millones más que en diciembre, lo que supone un avance de apenas un 0,16%, pero lo importante es que por primera vez en la crisis ha aumentado el saldo vivo de los préstamos en un primer semestre.

El Banco de España no desarrolla ese dato por comunidades, pero si se analizan los balances de Kutxabank y Laboral Kutxa también se percibe el cambio de tendencia en Euskadi. Esas dos entidades financieras concentran más de la mitad de los créditos vascos. Además, su actividad está muy centrada en Euskadi y, por ello, aunque en sus cuentas no distinguen los préstamos suscritos en la CAV de los del resto del Estado, es posible interpretar sus números como un termómetro de la situación vasca.

Kutxabank logró en sus resultados del primer semestre aumentar el saldo vivo del crédito a la clientela en un 0,7%. El banco de las tres antiguas cajas de ahorro vascas se sumó de este modo a la dinámica de los grandes bancos del Estado, que arrojan ritmos muy similares que van del 1% de Caixabank al 0,4% del Banco Bilbao Vizcaya Argentaria, dos entidades por cierto con gran actividad en Euskadi. En el caso de Laboral Kutxa los préstamos apuntados en su balance se han mantenido, apenas han registrado un ligero retroceso del 0,1%.

Son datos referidos al conjunto de la actividad crediticia de ambos bancos, contabilizando las operaciones con familias, empresas y otras entidades financieras, pero sirven de indicativo del cambio de tendencia del consumo de los hogares. Sobre todo porque en el arranque de este año son precisamente las hipotecas y los créditos al consumo los que más están impulsando los resultados de la banca de la Comunidad Vasca.

hipotecas y créditos al consumo En el caso de Kutxabank los prestamos para la compra de vivienda han crecido un 40% en lo que va de año y los vinculados al consumo aumentan un 31%. Laboral Kutxa, por su parte, registra un incremento del 31,5% en las operaciones con garantía hipotecaria y del 17% en las de consumo.

A pesar de que la férrea tenaza de la crisis también se ha notado y mucho en Euskadi, la situación ha sido más favorable en la CAV que en el resto del Estado durante los últimos años y eso invita a pensar que también la recuperación estará cristalizando con mayor robustez.

A la espera de conocer los datos de junio, el detalle de crédito vivo en Euskadi en el primer trimestre ya refleja un cambio de tendencia. Contabilizando los préstamos a las familias, a las empresas y a las administraciones, los vascos debían 70.474 millones a la banca. Son 690 millones más que un año antes, lo que supone un incremento del saldo de un 0,98%.

En cambio, en el conjunto del Estado todavía no ha sido posible que se registre un aumento del volumen global del crédito ni en términos anuales ni trimestre sobre trimestre. Así, si se toma de nuevo como referencia el primer trimestre de este año; donde Euskadi registra un crecimiento cercano al 1%, España pierde más de un 6%. Por ello, si se tiene en cuenta asimismo el repunte de los créditos a particulares cabe deducir que la CAV estará por encima del 0,16% de crecimiento en junio de las operaciones con los hogares en el Estado.

Habrá que esperar al boletín estadístico de septiembre del Banco de España para saber si la situación cambia en el Estado tras la mejoría en el ámbito del crédito familiar y también crece el saldo del conjunto de los créditos y se rompe la tendencia de la crisis.

Esa posibilidad se materializará si también ha crecido la financiación a las empresas. En el caso de Euskadi, tomando otra vez la referencia de los dos bancos con mayor volumen de negocio, esa evolución ya se está produciendo. En los seis primeros meses del año, Kutxabank ha aprobado créditos a empresas por valor de casi 5.000 millones y las inversiones productivas de las pyme han aumentado en un 48%.

En el ámbito mercantil, el saldo de nuevos créditos concedidos por Laboral Kutxa a empresas desde enero hasta junio ha experimentado un incremento del 2%.

amortizaciones de deuda Sumando todos esos aspectos positivos, es posible que la banca vasca acabe este año con más inversión crediticia que la que tenían a 1 de enero. De lograrse sería todo un hito en el escenario de la recuperación económica, porque en el actual contexto de bajos tipos de interés muchos clientes han apostado por amortizar parte o toda su deuda bancaria.

No hay productos financieros en el mercado que ofrezcan más rentabilidad que el desapalancamiento y las familias que tienen ahorros están invirtiendo en la cancelación o la reducción de la duración de sus créditos. Ahí entra en juego el mayor dinamismo del consumo actual.

La recuperación económica permitió el año pasado tanto a Kutxabank como a Laboral Kutxa contener la caída del crédito a su clientela. En concreto el banco de las tres antiguas cajas de ahorros pasó de perder un 2,1% en su saldo vivo de préstamos al 1,5%. Mientras que la cooperativa de crédito redujo en 2015 su inversión crediticia en un 4,5%, la mitad de la caída de 2014. La evolución de ambas entidades en la primera mitad del año alimenta las expectativas de que sea posible romper otra de las dinámicas negativas de la crisis.