bilbao - La industria y los servicios, que suman más del 80% del PIB vasco, han alcanzado el ecuador del año en positivo, con más pedidos y más volumen de negocio que en 2015. El sector manufacturero ha sufrido un serio revés en junio, pero cierra los primeros seis meses del año con un nivel de facturación un 1,6% superior al del pasado ejercicio, con lo que se da la vuelta al retroceso de la primera mitad de 2015. Los servicios, por su parte, siguen creciendo en junio con un repunte del empleo hasta junio de más del 2%.

Los datos hechos públicos ayer por el INE dan cuenta de un mal mes en la industria vasca en junio, con una fuerte caída de los pedidos del 10% en comparación con el mismo mes del año pasado. Pero el buen comienzo de año, con incrementos de los pedidos en meses como enero o febrero inéditos desde 2011 -en enero se dispararon más del 25%-, permiten a Euskadi alcanzar la mitad del año en positivo, tanto en lo que respecta a la entrada de encargos como en el apartado de la facturación. En el primer caso se registra un incremento de algo más del 3%, similar al de 2015, mientras la facturación deja atrás los números rojos del pasado año y se anota una subida del 1,6%.

El sector industrial vasco da así otro paso en el camino de la recuperación, en el que se está topando con importantes obstáculos en ramas clave como el acero. Aun así, el sector se ha asentado en cifras de crecimiento de la actividad de entre el 2 y el 3%. Según Eustat en el primer semestre la actividad industrial ha crecido un 2,1% en relación a 2015, gracias sobre todo a los buenos resultados logrados por las factorías de Araba, mientras que en Bizkaia y Gipuzkoa se notan las últimas decisiones tomadas por la multinacional ArcelorMittal en Sestao y Zumarraga. En cambio, la buena salud de la que goza la automoción permiten a dos grandes factorías alavesas como son Michelin o Mercedes mantener la producción al alza.

Aunque se trata de un buen resultado, el avance hasta junio supone retroceder en comparación con el crecimiento de la actividad industrial registrado en 2015, del 3,5%, lo que suponía duplicar los números del año anterior. En todo caso, se trata del tercer ejercicio en el que la industria presenta cifras positivas después del parón de la crisis, lo que permite seguir alimentando la sensación de que el motor de la economía vasca ha salido del túnel.

La variación respecto al ejercicio pasado llega acompañada de un cambio de orden en la aportación de los territorios, ya que en 2015 las fábricas vizcainas veían aumentar su actividad cerca del 5%, mientras que Araba presentaba resultados más modestos. La situación ha dado la vuelta completamente por la dispar evolución que presentan las distintas ramas productivas, entre las que destacan la automoción y la maquinaria mientras otras actividades con fuerte implantación en territorio vizcaino, como la siderurgia o la energía, se enfrentan a un contexto internacional difícil condicionado por los bajos precios del petróleo y la fuerte competencia china.

En todo caso, los datos hechos públicos ayer por Eustat apuntan a que el sector fabril está consiguiendo sortear las dificultades y, en términos generales, seguir reforzando la cartera de pedidos e incrementando la facturación. El aumento de la cifra de negocio hasta junio en Euskadi contrasta con la evolución en el conjunto del Estado, donde la facturación registra el mismo nivel que el año pasado, si bien la caída en junio en España es menos acusada.

más empleo en servicios En cuanto a los servicios, que concentran la mayor parte de los trabajadores vascos, cierran el primer semestre con un incremento de la facturación de más del 5%, también por encima de la media estatal. El sector terciario no se resintió en junio como ocurrió en la industria, registrando en el inicio del verano un incremento interanual de la facturación del 4,8%.

El empleo en los servicios creció en junio el 2,4% en comparación con el mismo mes de 2015, mientras que el ascenso en lo que va de año es del 2,1%, lo que según la encuesta de empleo del INE supone la creación de más de 13.000 puestos de trabajo entre enero y junio.

Los servicios mostraron un buen comportamiento en junio también en el Estado, con un aumento del empleo del 2,3%, muy similar a la evolución de Euskadi. Aunque todas las ramas terciarias ven crecer sus números, son la venta y reparación de vehículos, la hostelería y las actividades profesionales y científicas las que anotan mejores resultados. Los territorios donde más aumentó la facturación son Baleares, Cantabria y Galicia, y donde lo hizo en menor medida fue en Castilla y León y en Asturias.

Industria. En la industria vasca subió la facturación el 1,6% hasta junio, lo que supone dar la vuelta al mal dato del periodo enero-junio de 2015. La entrada de pedidos creció el 3,1%, al nivel de 2015, a pesar del bache de junio, que se saldó con una caída interanual de los pedidos del 10%. La subida de la facturación en la industria vasca en lo que va de año contrasta con la evolución en España, donde se mantiene el balance plano.

Servicios. Los servicios sí presentan un dato positivo de facturación en junio, y además en el acumulado del año se apuntan un incremento de la cifra de negocios del 5,1%, por encima de la media estatal. La reparación y venta de vehículos y la hostelería son las ramas más dinámicas.

+2,1%

El empleo creció en los servicios más del 2% en el periodo enero-junio en comparación con 2015, lo que en números absolutos supone la creación de más de 13.000 puestos de trabajo.