MADRID/Gasteiz - Los vascos dedican 179 días al año a trabajar para pagar sus impuestos, dos días menos que la media del Estado y seis menos que los catalanes, que son los que más esfuerzo fiscal hacen, según un informe presentado ayer. Así, un catalán dedica 185 días a trabajar para pagar impuestos, cuatro más que la media de los españoles (181 días), según un estudio de la Unión de Contribuyentes y la Fundación para el Avance de la Libertad sobre el llamado “día de la liberación fiscal”, el 30 de junio a nivel estatal. Se trata de un informe que calcula el día en que los trabajadores dejan de dedicar su esfuerzo laboral a pagar impuestos tomando como modelo el de una persona casada, con un hijo a cargo de los dos progenitores y con unos ingresos brutos de 24.400 euros.

Según este documento, los españoles dedicarán este año 181 días a trabajar para pagar impuestos, cuatro días más que hace seis años, lo que equivale a 15.706 euros anuales. Es decir, que desde el 1 de enero hasta el 30 de junio los españoles trabajarán “exclusivamente” para costear los impuesto. En el caso de Euskadi, la llamada “liberación fiscal” tendrá lugar el 28 de junio, la misma fecha que el año pasado. Según el informe, los trabajadores vascos pagan de media 3.099 euros por IRPF, 94 euros más que la media nacional. Por comunidades, los aragoneses, asturianos, baleares, extremeños, madrileños y navarros se “liberarán” de pagar impuestos el 30 de junio, pero los catalanes tendrán que seguir trabajando para Hacienda hasta el 4 de julio. Los valencianos terminarán de pagar impuestos el 1 de julio, y los cántabros y castellanomanchegos, el 2 de julio.

Por debajo de la media están los riojanos, que terminan el 27 de junio; los canarios, gallegos y vascos, el 28 de junio, y los andaluces, castellanoleoneses y murcianos, el 29 de junio. Las variaciones entre unas comunidades y otras se debe en gran medida a los impuestos municipales como el IBI o el Impuesto de Circulación. - Efe