bilbao - El presidente de Aernnova, Iñaki López Gandasegi, explicó ayer que la empresa va “muy bien en su conjunto” a pesar de la situación “puntual” que vive en Berantevilla, donde desde hace meses intenta acometer un ajuste de personal. La situación de exceso de mano de obra se produce en “un programa concreto en una planta concreta”, dijo el presidente de la firma.

La dirección de Aernnova ha presentado esta semana al comité de Berantevilla un ERE de suspensión de la jornada durante 41 días, que quiere aplicar “cuanto antes” y que vincula a un acuerdo global de reajuste. Dicho plan contempla la salida de alrededor de una quinta parte de la plantilla a través de prejubilaciones y otras bajas pactadas. La postura de la empresa en Berantevilla ha generado controversia ya que a finales de 2015 llegó a presentar un ERE para despedir a 133 trabajadores prácticamente a la vez que anunciaba la apertura de una nueva fábrica en Toledo.

López Gandasegi comentó ayer que, pese a la buena salud del sector, “puede haber caídas coyunturales de empleo, porque hay contratos como los de apoyo a la ingeniería que terminan y no se renuevan”. “La estructura de empleo fija y estable no ha cambiado”, dijo en referencia a esos casi 12.500 empleos que mantienen las empresas vascas del sector, de los que 4.200 corresponden a las plantas de la CAV. - DNA