madrid - El presidente de la Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb), Jaime Echegoyen, avanzó ayer que el llamado banco malo vendió 5.000 inmuebles en el primer semestre del año, lo que supone vender 28 unidades al día.
Sin embargo, estas cifras implican que la sociedad redujo su ritmo de venta un 38,27% respecto al mismo periodo del año pasado, cuando vendió 8.100 inmuebles, 45 unidades al día. Para 2015, Sareb se ha marcado el objetivo de vender 15.000 inmuebles. Según avanzó Echegoyen durante su comparecencia en la Comisión de Economía del Congreso para dar cuenta de la actividad de la sociedad durante el año pasado, el 60% de los 5.000 inmuebles vendidos en el primer semestre de este ejercicio salieron del balance de los promotores mediante acuerdos para facilitar la venta de viviendas que figuraban como garantía de sus préstamos.
“Sólo en el primer semestre hemos firmado casi 800 de estos acuerdos, que denominamos Planes de Dinamización de Ventas (PDVs)”, apuntó el presidente de Sareb, incidiendo a renglón seguido en que se trata de “dar algo de tiempo y flexibilidad” a promotores que “no pudieron terminar su proyecto por la crisis”.
El banco malo español, trabaja para no pedir más dinero a los contribuyentes y devolver todo lo que se ha recibido del Estado, para lo que con objeto de aumentar sus ingresos tiene previsto ampliar su actividad a los locales comerciales para ayudar a pequeños y medianos empresarios.
Echegoyen quiso destacar que la entidad será capaz de repagar la deuda y la carga financiera derivada de los 50.700 millones de euros de deuda privada que tuvo que emitir para hacerse con los activos tóxicos de los bancos, un proceso que ya ha comenzado.
Además, quiso incidir en que trabajando es como se recuperará el capital invertido, siguiendo un plan de negocio que “guía nuestro camino” casi por imperativo legal, aunque cada año es necesario ajustarlo de acuerdo a la volatilidad que ofrecen los mercados. - Efe/E.P.
