Bilbao - Samsung es un gigante líder mundial en la fabricación de productos electrónicos y presente en sectores como la construcción o la automoción. Solo en la rama de electrónica, la firma surcoreana cuenta con más de 300.000 empleados en 84 países del mundo, más de la mitad ingenieros y doctores implicados en labores de investigación. Su director de consumo de la división IT y Movilidad (informática y móviles) en España ha estado en Bilbao presentando el nuevo smartphone Galaxy S6.
Parece que la situación económica en Europa y en España se estabiliza y las previsiones pintan bien para el consumo. ¿Cómo ha empezado el año para Samsung?
-El mercado de móviles y tabletas ha arrancado el año muy bien. Es un mercado que está creciendo y el consumo va mejor que en 2014, que fue más flojo. En enero hubo un incremento de las ventas del 5% en electrónica respecto a 2014. Somos optimistas, hablas con las tiendas y te dicen que se nota un poco más de alegría. Esperamos un incremento del número total de ventas y que Samsung dé un paso más en su posición de líder del mercado en España.
Dice que 2014 no fue un buen año. ¿Por qué?
-Fue un año de estabilización de las ventas. Samsung llevaba desde 2005 con crecimientos, año tras año, muy potentes y en 2014 hubo un pequeño estancamiento como consecuencia de una competencia terrible. En cualquier centro comercial tienes una variedad de marcas muy amplia que han ido buscando hacer productos atractivos con componentes ensamblados de manera fácil y barata a buenos precios. Eso a los fabricantes tradicionales nos ha hecho daño y obligado a replantearnos la estrategia.
¿Cómo ha sido la evolución de las ventas durante la crisis?
-2014 fue un año en el que el nivel fue bastante similar a 2013. En los años anteriores, en cambio, la crisis no se ha notado. Es curioso, la gente va al supermercado y se aprieta el cinturón pero, al menos hasta el año pasado, en electrónica y consumo en general, no solo en móviles, la crisis no se ha notado en el nivel de ventas.
¿Tampoco en el caso de televisores y otros electrodomésticos para el hogar?
-La caída de la construcción sí ha impactado bastante en las ventas de electrodomésticos, pero la televisión estos años ha tenido sus puntos de activación con los mundiales de fútbol por ejemplo, o con el cambio del analógico al digital. Las nuevas tecnologías que vas aplicando hacen que la televisión haya mantenido el tipo estos años con un crecimiento sostenible. En general, teléfonos móviles y televisores han aguantado bien la crisis. En 2014 hubo mundial de fútbol y las ventas también crecieron. Este es un mercado muy ligado a la renovación tecnológica, que hace que el mercado vaya creciendo.
¿Cuál es el precio medio al que más se recurre en móvil y televisor?
-La gama alta sigue creciendo mucho en móviles. Cada vez tenemos más usuarios de la familia S. En la tableta también, por encima de los 300 euros se está creciendo mucho. En televisiones el cliente que se lo puede permitir muchas veces paga cien euros más por diez pulgadas más. Es un sector muy impulsivo y de poder cambiar en el punto de venta la decisión de compra.
¿Qué papel juega la tecnología en este sector? ¿Es imprescindible invertir en innovación?
-La percepción con el S6 es esa. Detrás hay un gran esfuerzo de inversión en tecnología. El proceso de fabricación es muy complicado, tienes que tener fábricas preparadas para producir en grandes cantidades este tipo de nuevos materiales. Luego tienes que tener la capacidad de vender. Samsung vende 1.200 millones de teléfonos en el mundo al año, unos 17 millones en España.
¿Qué cuota del mercado de móvil tiene Samsung en España?
-Cerca del 40%. Somos líderes también en tabletas, televisores, monitores y otras categorías.
Si Samsung vende 17 millones, en total se compra prácticamente un móvil por persona al año.
-En España hay datos de penetración de entre el 105 y el 110%, es decir, hay más móviles que habitantes. Esto es lógico, ya que hay personas que tienen más de un teléfono. El tiempo medio de renovación está entre los 18 y los 24 meses. Mucha gente negocia con su operador para cambiarse antes de los dos años.
También hay un avance en la penetración a nuevos colectivos como adolescentes o personas mayores.
-Sí, cada vez hay menos sectores vírgenes en este sentido. El tema de las tabletas ha servido para entrar en el sector de la tercera edad, ya que con la pantalla táctil se ha llegado a personas que no tenían ganas de aprender cómo funciona un portátil. También hacemos un esfuerzo por cubrir todos los canales de negocio, desde consumo a la empresa. Queremos que se considere a Samsung una marca corporativa que permita a los técnicos de las grandes multinacionales apostar por nosotros. También hay una apuesta por nuevas categorías de productos como relojes o gafas, ideas que hay que lanzar, ya que solo cuando las distribuyes ves su potencial.
Ahí mantienen una dura competencia con Apple.
-Ellos van a los segmentos de valor y ayudan a desarrollar las categorías. El reloj cuando salga tendrá un poco más de desarrollo. Eso está bien, entre los líderes del mercado tenemos que lograr que la gente no compre un teléfono de 100 euros y vaya a uno de 600.
Hablamos de cantidades ya importantes. ¿Les hace daño la falta de crédito?
-Hombre, el crédito ayuda. Las tiendas que ofrecen servicios de financiación gratuita notan un impacto inmediato en las ventas. Está claro que así se baja la barrera de acceso a productos de entre 300 a 1.000 euros a personas que no pueden pagar ese dinero al contado.
¿Tiene Samsung algún mercado preferente a nivel mundial?
-Brasil, China, India, Japón o Estados Unidos son mercados críticos en los que hay que estar y hay que estar bien. Hay que tener un potencial de crecimiento fuerte ya que el poder adquisitivo va creciendo. Europa es un mercado más maduro, es un mercado de presente. En los mercados de futuro tienes que estar sí o sí.