GASTEIZ - El nuevo récord de exportaciones de Euskadi ha llegado con un premio extra para la economía vasca, el año pasado las empresas vascas vendieron en los mercados exteriores más productos de alto valor tecnológico que nunca. Se cerraron operaciones por valor de 10.324 millones de euros, un nivel que está 1.660 millones por encima de los números que se registraban antes de la crisis.

El porcentaje sobre el total de las ventas con label tecnológico se eleva hasta el 46%, el valor más alto desde el estallido de la crisis. En el año 2010, el porcentaje cayó hasta el 42% y ahora se vuelve a acercar al máximo alcanzado en 2005, cuando la mitad de los bienes exportados en Euskadi tenían un elevado nivel de I+D.

Son productos que se forjan en las fábricas de la CAV gracias a la cultura de la innovación. Se trata de coches, componentes de automoción, máquina herramienta, maquinaria en general, trenes, piezas de aviones, electrodomésticos, componentes electrónicos e informáticos, productos químicos o fármacos, entre otros. Son bienes cuyas ventas subieron un 14% el año pasado y superaron en casi mil millones el récord anterior, que data de 2012, cuando se firmó también el anterior máximo registro del conjunto de las exportaciones.

Lo más importante es que detrás de ese diferencial respecto a hace dos años está el esfuerzo de las empresas por abrir nuevos mercados. Ese terreno ganado tendrá a partir de ahora un efecto multiplicador, porque la recuperación traerá mayor empuje en un campo clave, el de la competencia con productos de gran valor añadido frente a los países que apuestan por la fabricación low cost.

Según los datos del Instituto Vasco de Estadística, Eustat, el herrialde más tecnológico en sus exportaciones es Gipuzkoa, con 4.236,7 millones, el 41% del total de ventas con perfil innovador de la CAV. En el caso guipuzcoano es determinante el peso en su economía de la máquina herramienta, que supone el 50% de sus ventas de alto nivel. Además, el papel tractor de Construcciones y Auxiliar de Ferrocarriles (CAF) se pone de relieve en las ventas en el capítulo arancelario de vehículos de vía férrea (652,1 millones). A todo ello hay que añadir que, pese al batacazo de Fagor, el sector de las máquinas y aparatos eléctricos ?-donde se engloban los electrodomésticos- exportó más de 505 millones el año pasado. Máquina herramienta, unidades de trenes y electrodomésticos concentran el 77% de las operaciones guipuzcoanas de alta tecnología.

Un porcentaje muy similar al que representa en Araba sólo la automoción (casi un 72%). El volumen de ventas de Mercedes y Michelin, los motores industriales alaveses, alimenta las actividades ligadas al automóvil y sus componentes, que exportan más de 2.200 millones. Queda poca tarta para el resto y solo destacan la industria química, con algo más del 6%, y la construcción aeronáutica, que ronda el 4,5%. Descontadas estas tres partidas arancelarias, solo queda un 19% a repartir entre el resto. En conjunto, las empresas alavesas colocan fuera productos innovadores por valor de 3.176 millones.

Bizkaia es el territorio que menos tecnología factura en el exterior, con 2.910,9 millones. Tiene sin embargo dos grandes ventajas respecto a Araba y Gipuzkoa. Protagoniza el crecimiento más sostenido y, de hecho, en 2013 fue el único de los tres que mejoró sus datos. Y, asimismo, tiene la estructura más diversificada. Tres segmentos industriales potentes -automoción (30%), bienes de equipo (27%) y fabricación química (22%)- superan el 20%. Si se produce un parón generalizado en uno de ellos, el volumen global no se resiente en exceso.

Y por si no fuera suficiente garantía de estabilidad, Bizkaia cuenta con el polo de innovación del automóvil, el Automotive Intelligence Center, que dinamiza la I+D+i y atrae cada vez a más multinacionales.

destino de las exportaciones En cuanto a los mercados destino de las exportaciones, la mayor parte de las ventas, algo más del 61%, recalan en la Unión Europea. Son 6.334 millones de euros, de ellos algo más de 4.800 millones se quedan en la eurozona, principalmente en Alemania y Francia.

Otros 1.500 millones en bienes de alto valor tecnológico viajan hacia América, más de la mitad hacia el hemisferio sur. Norteamérica -México, Estados Unidos y Cánada- compra productos de gran valor añadido por más de 735 millones de euros.

Los miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) son también grandes compradores de tecnología vasca, con una facturación global de 717 millones. Un volumen que demuestra que se ha abierto los últimos años una importante puerta hacia Oriente Medio. La gran asignatura pendiente es Asia, un gran mercado al que sólo se exportan hoy 324 millones, pero que está empezando a comprar productos de gran valor. La apertura esta semana de una oficina de Spri en Singapur pone de relieve el interés del Gobierno vasco por facilitar a las empresas la llegada a esa zona del planeta.