MADRID. Así figura en uno de los correos electrónicos corporativos intervenidos a Blesa, a los que hace mención Rodolfo Benito, uno de los imputados por las 'tarjetas B' opacas al fisco que están siendo investigadas en la Audiencia Nacional por el supuesto quebranto para la caja de 15,5 millones de euros entre 1999 y 2012.

El representante de CCOO Rodolfo Benito, que declaró este lunes ante el juez Fernando Andreu sin que el fiscal solicitara fianza para él, ha presentado un recurso contra su citación como imputado, al que ha tenido acceso Europa Press, en el que destaca que los consejeros no tenían capacidad de decisión y de acceso a los procedimientos que se seguían para la contabilización y administración de dichas cuentas.

Y para ilustrar su afirmación expone que el mismo expresidente de la Asamblea de Madrid (PP) y miembro del Consejo de Administración, Jesús Pedroche, solicitó por e-mail a la dirección de la caja de ahorros un listado de los movimientos de su cuenta, según se deduce en los correos de Blesa.

El entonces secretario general de la entidad, Enrique de la Torre, le respondió que los gastos eran asumidos por la caja y, por ello, no se enviaba a nadie el listado de movimientos que quedaba como responsabilidad de Caja Madrid ante las autoridades tributarias. "Por supuesto, si hubiera alguna discordancia, lo podemos mirar a tu conveniencia". Al enterarse Blesa de esta petición de información, respondió en un e-mail a De la Torre: "*De qué va este señor?".

BANCO DE ESPAÑA, CON "ACCESO" A OPERACIONES

En su recurso, Benito asegura que no participó en ninguna decisión relacionada con la emisión de las 'visa Business Plata' entregadas a los consejeros y que el título por el que se recibió dicha tarjeta para su uso "no originaba en ningún caso una obligación de entregar o devolver las cantidades dispuestas dentro del límite mensual que, según el cargo que ocupase su beneficiario se podía disponer de su saldo libremente, sin necesidad de justificar el concepto por el que se disponía de cada tarjeta".

Por último, el exconsejero pone de relieve que había un equipo de inspectores del Banco de España desplazados a Caja Madrid "de forma permanente" y que se trataba de un equipo "numeroso, que tenía terminales para acceder on-line a cualquier operación". "Se trataba de una cuenta de gastos de la entidad", dice, para señalar que las cuentas de las tarjetas investigadas eran "perfectamente conocidas, "quizá mejor que nadie", por la auditoría interna, "varios de cuyos responsables eran usuarios de dichas tarjetas".

"La capacidad de decisión individual de los consejeros estaba restringida prácticamente a la votación en las sesiones del Consejo de Administración, hasta el punto de que el presidente de la entidad no tenía obligación de incluir en el orden del día ningún punto que no fuera solicitado por escrito por una quinta parte de los vocales", concluye.

En el marco de esta investigación, el titular del Juzgado Central de Instrucción número 4 mantiene imputados a 82 antiguos miembros del Consejo de Administración y exdirectivos de Caja Madrid, entre ellos los expresidentes Miguel Blesa y Rodrigo Rato o el ex director financiero Ildefonso Sánchez Barcoj.

Los primeros 27 exconsejeros declaran esta semana ante el juez Andreu imputados por un delito de administración leal, que habrían cometido por autorizar el uso de los plásticos, y otro de apropiación indebida, que se podría atribuir a los 82 exdirectivos que los utilizaron.