gasteiz - La participación de los trabajadores en las empresas vascas cuenta con una notable tradición en Euskadi de la mano de las sociedades de la economía social -cooperativas y sociedades laborales-, pero el Gobierno Vasco quiere fomentar esa línea de gestión, contemplada en la estrategia Innobideak. En este sentido, el Ejecutivo, a través de la SPRI, implantará este año un nuevo programa para impulsar la participación del colectivo laboral en las compañías de cara a “mejorar su competitividad y lograr una mayor cohesión social”. Este plan en concreto contará con un presupuesto de un millón de euros, según señalaron ayer responsables del Gobierno Vasco.
La iniciativa -que complementa el Fondo Lanpar impulsado por Industria, Empleo y ASLE para financiar procesos de participación de trabajadores en el capital- se enmarca dentro de la citada estrategia Innobideak 2015 que contribuye a la mejora de la innovación, en este caso no tecnológica, en las empresas vascas.
La viceconsejera de Tecnología del Gobierno Vasco, Estibaliz Hernáez; el director de Innovación, Aitor Urzelay; y el director del área de Tecnología de la SPRI, Aitor Cobanera fueron los encargados de presentar ayer las diferentes líneas de apoyo a la mejora de los modelos de gestión y de las estrategias de diversificación de productos, servicios y mercado, que incluyen el referido nuevo programa para la participación de trabajadores en las empresas.
En total, el Ejecutivo vasco habilitará hasta 8,1 millones de euros en las diversas actuaciones durante 2015 porque, según Estibaliz Hernáez, “observamos la necesidad de introducir más innovación no tecnológica en una apuesta por nuevos modelos de gestión con mayor visión estratégica y con mayores cauces para la participación de los trabajadores en la actividad empresarial”.
En el caso concreto de las iniciativas para fomentar la participación del colectivo laboral en las empresas, el Ejecutivo de Gasteiz pone en marcha el nuevo programa Innobideak Pertsonak al servicio de las compañías vascas que quieran implantar fórmulas que incorporen la participación de los trabajadores en las diferentes áreas de la actividad empresarial, tanto en lo relativo a la toma de decisiones de gestión en la empresa como en el reparto de los beneficios, así como ante la posibilidad de que entren a formar parte del capital.
