Madrid - En la primera subasta celebrada tras el anuncio del plan de compra de activos públicos y privados del Banco Central Europeo, España logró reducir los intereses de su deuda de forma importante. La victoria de Syriza en Grecia no tuvo incidencia en una colocación productiva para el Tesoro español.
España colocó ayer 2.561,95 millones de euros en Letras a tres y nueve meses. Las sustanciales rebajas se tradujeron en que en el caso del interés del papel a tres meses se logró el mínimo histórico de la serie histórica (0,03%), y en el de los títulos a nueve meses el segundo más bajo (0,143%) -tras el mínimo de agosto de 2014, 0,115%-.
Tras la subasta se puede concluir que las Letras españolas a más corto plazo están cerca de colocarse a tipos negativos, como ya ocurre con las de Francia o Alemania.
La mayor parte de lo adjudicado ayer, 2.000,63 millones de euros, salió a nueve meses en tanto que los 561,32 millones de euros restantes se colocaron a tres meses. La demanda superó en 4,2 veces lo vendido en el caso del papel al más corto plazo y en 2,6 veces lo colocado a nueve meses. De hecho, la demanda de las entidades alcanzó los 7.612 millones de euros, con lo que la ratio de cobertura, que es la proporción entre las solicitudes y el importe finalmente adjudicado se elevó en conjunto a 2,9 veces.
Desde el comienzo del año, el Tesoro estatal ha captado 19.566 millones de euros, un 13,8% de la previsión de emisión a medio y largo plazo para todo el año -que asciende a 141.996 millones-. El coste medio de la deuda del Estado a la emisión se situó en el 1,52% en diciembre de 2014, frente al 2,45% de finales de 2013.
El organismo español ha cerrado así con éxito la última subasta de enero y la primera tras conocer el plan del BCE de realizar compras de activos por importe de 60.000 millones de euros al mes hasta al menos el mes de septiembre de 2016 o hasta que se aprecie un ritmo sostenido en la inflación consistente con el objetivo de estabilidad del BCE. - Efe/ Europa Press