MADRID - Los precios siguen dando quebraderos de cabeza, aunque el Gobierno español sigue repitiendo incesantemente que el riesgo a un ciclo de deflación negativo está descartado. Los datos muestran sin embargo que los precios, lejos de crecer, mantienen una tendencia bajista, ahora acentuada por la súbita bajada de precios del petróleo. Según los datos oficiales del Instituto Nacional de Estadística El índice de precios de consumo cerró el año con un descenso interanual del 0,7% en la CAV y del 1,2% en Nafarroa. En el conjunto del Estado el IPC de diciembre acarreó un descenso interanual del 1%.

Atendiendo a los detalles publicados por el INE la rebaja de los combustibles explica en gran medida el fuerte descenso del IPC a nivel global. Ya sucedió en la zona euro, con una caída del 0,2% en la inflación anual de 2014. En la CAV el dato oficial de diciembre supone el mayor descenso interanual de los últimos tiempos. Si bien el Estado ya había bordeado los índices negativos en seis de los meses del año, la CAV solo había añadido el símbolo negativo en tres ocasiones, en julio, agosto y noviembre (con marcas del -0,1%, del -0,3% y del -0,1% respectivamente), por lo que el -0,7% supone la mayor bajada interanual del año. Peor es el caso de Nafarroa, que acumula doce meses consecutivos con tasa interanuales de IPC negativas y acumula además una tasa más negativa que la del Estado.

El abaratamiento de los carburantes y lubricantes es la principal causa que explica estas marcas negativas de inflación. En la CAV, una de las mayores caídas se registró en un sector muy relacionado, como el del transporte, -5%; si bien la mayor rebaja se produjo en el sector de las comunicaciones con el -5,6%. También descendieron los precios en ocio y cultura (-0,9%), bebidas alcohólicas y tabaco (-0,2%), en medicina (-0,2%), alimentos y bebidas no alcohólicas (-0,1%) y menaje (-0,1%). Por el contrario, subieron en enseñanza (2,9%), otros (1,4%), vivienda (0,6%), vestido y calzado (0,4%), y hoteles, cafés y restaurantes (0,4%).

El precio del barril del petróleo Brent ronda actualmente los 48 dólares, menos de la mitad de los 110 dólares a que cotizaba a principios del verano. Pero la realidad es que los precios ya han mantenido una tendencia cercana a valores en negativo durante los últimos meses. La deflación, entendida como un proceso en el que los consumidores esperan a realizar sus compras a que los precios bajen más, lo que en sí empeora los datos de inflación y retrasan el crecimiento, no se ha producido, según los expertos. El Gobierno español insiste en que esa situación no se va a dar, pero la inflación negativa es ya una realidad y no tiene visos de cambiar.

Continuará La tendencia continuará. Según el secretario de Estado de Economía, Íñigo Fernández de Mesa, la caída de los precios del petróleo hará que la inflación siga en tasas negativas en 2015, aunque según sus cuentas el IPC se irá moderando a partir del segundo semestre. No es la única previsión que apunta a esa tendencia. La patronal española, la CEOE, pronostica asimismo que la inflación seguirá en tasas negativas en la mayor parte de 2015, más acusadas en los primeros meses y que se irán suavizando a medida que se estabilicen los precios del crudo. La Fundación de Cajas de Ahorro (Funcas) afirmó ayer que estima que el IPC caerá un 1,2% de media en el conjunto de 2015.

La bajada de los precios del petróleo, que por un lado aumentan la productividad de las empresas españolas y europeas, también suponen un lastre para la inflación. La amenaza de la deflación es cada vez más real en Europa, lo que parece abocar al Banco Central Europeo a tomar medidas más contundentes para lograr que los precios vuelvan a crecer y además se acerquen a su objetivo, un crecimiento inflacionario cercano al 2%.

Pero en Europa hay diferentes ritmos de crecimiento y también de inflación. España, con ese -1%, es uno de los países que más alerta debe estar con su inflación. De hecho, a nivel estatal los precios cerraron el año en negativo por primera vez desde que el INE recopila esta información, desde 1961.

Pero el Gobierno popular sigue empeñado en ver los beneficios de la situación, léase que las familias aumentan su poder adquisitivo por la rebaja de precios. La situación sin embargo no ayuda a subir los salarios, hecho que de por sí empujaría la inflación al alza, y en último término, rebajaría los costes de la deuda, tanto privada como pública -ya que el coste sería el mismo pero el poder adquisitivo, con un mayor salario, sería superior-. Preguntado sobre si ha llegado el momento de subir los salarios, el secretario de Estado de Economía señaló que la moderación salarial ha sido un factor importante a al hora de reducir el desempleo de forma “acelerada”.

Fernández de Mesa no cree en los riesgos de la situación y ayer apuntó que en España crecerán todos los componentes de la demanda, tanto el consumo privado como la inversión en bienes de equipo y en construcción. “La demanda interna seguirá siendo un factor importante para crecer en 2015”, insistió.

Además recordó que la inflación subyacente, la que excluye los componentes más volátiles, no cerró el año en negativo, sino en el 0%.

-0,7%. El Índice de Precios al Consumo (IPC) descendió en Euskadi un 0,7% al cierre de 2014 con respecto a diciembre de un año antes.

-0,6%. La variación mensual, diciembre sobre noviembre de 2014, registró también una bajada del 0,7%, según los datos ofrecidos por el INE.

Diferencia anual. La tasa interanual fue negativa en comunicaciones (5,6%), y en transporte (-5,0%), fundamentalmente por la bajada del petróleo. Por contra, la tasa más inflacionista se registró en la enseñanza (2,9%).

Por sectores. En la variación mensual, los precios descendieron, sobre todo, en vestido y calzado (-3,4%) y transporte (-3,4%). Por el contrario, el sector más inflacionista en diciembre fue el del ocio y la cultura, con un crecimiento del 1,8%.