BILBAO - El diálogo social es fundamental para el desarrollo democrático, “incluso si no hay acuerdos” entre las partes, señaló ayer el presidente de Cepyme y candidato a la presidencia de la organización empresarial española CEOE, Antonio Garamendi. El representante del empresariado vasco defendió el papel de los sindicatos de los que no hay que olvidar, recordó, que “han sido una pieza clave para la estabilidad del país”.
En una semana en la que está prevista que se ponga en marcha en la CAV una mesa de diálogo social con presencia de algunos sindicatos y de Confebask, el aspirante vasco al puesto que ocupa ahora Joan Rosell en la cúpula patronal estatal mostró su preocupación por los daños en la imagen del empresariado, daños generados, entre otras razones, por los escándalos relacionados con gestiones irregulares que han afectado a varios de los directivos de CEOE que han rodeado al actual presidente catalán de la organización empresarial CEOE. En este sentido, Antonio Garamendi afirmó ayer en el transcurso de una entrevista en Efe, que uno de sus objetivos fundamentales es recuperar la influencia y el prestigio de la patronal y para ello aboga por “limpiar la imagen” de la organización, muy deteriorada por la crisis y los escándalos de corrupción, y aplicar de forma rigurosa un código ético de conducta.
El también presidente de Cepyme no dudó en hacer autocrítica y defendió un cambio de modelo, que vaya “de abajo a arriba”, con más participación y más transparencia, tanto externa como interna, pero sobre todo exige una conducta intachable y una recuperación de los valores éticos.
Si sale elegido presidente de CEOE el próximo 17 de diciembre, Antonio Garamendi señaló que una de sus aspiraciones es tener buenas relaciones con todos, con los sindicatos y con el Gobierno, y aseguró que entre sus planteamientos está “no llevarse mal con nadie”.
El candidato vizcaino a liderar la CEOE hizo hincapié en la lealtad institucional y aseguró que en temas de Estado, el Ejecutivo español contará con el apoyo de CEOE “siempre” y precisó que ese respaldo será trasladable “al Gobierno que toque, desde la alternancia”.
Respecto a los sindicatos, el aspirante a presidir a CEOE defiende el mundo sindical, pese a los escándalos de los últimos tiempos, y recordó que fueron una “pieza clave para la estabilidad del país”.
En definitiva, el candidato explica que su estrategia reside en recuperar el respeto de la sociedad y de tomar la iniciativa ya que una de las principales rémoras de la CEOE en los últimos años ha sido, en su opinión, la de “ir a remolque” de las reformas.
El programa de la candidatura de Antonio Garamendi, miembro también de Cebek, titulado De nuevo: independencia, ética y transparencia, aspira a organizar una red eficiente de organizaciones sectoriales y territoriales, que son la espina dorsal de la CEOE y que representan a más de un millón de empresas y dos millones de empresarios autónomos.
“No somos un club, ni un lobby, ni una asociación elitista” recoge Antonio Garamendi en su programa, donde propone organizar comisiones de trabajo capaces de crear “una línea política” con propuestas que tomen la delantera y den una orientación de hacia dónde debe ir España.
En la entrevista, Garamendi desgranó alguna de sus propuestas si logra alcanzar la presidencia de CEOE y entre ellas subrayó la importancia de mantener la moderación salarial.
Sobre las modalidades de contratos, Antonio Garamendi señaló que la contratación temporal y a tiempo parcial es muy valiosa para las empresas, pues permite adaptar las plantillas a las necesidades concretas de negocio en un momento determinado. Si una empresa percibe flexibilidad, “ve oportunidades para contratar”, afirmó. - DNA