gasteiz - El debate sobre la pobreza que acogió ayer el Parlamento Vasco superó los muros del Legislativo y se trasladó a la calle, al corazón neurálgico de Gasteiz donde representantes sindicales y trabajadores de empresas con amenaza de cierre reivindicaron acciones inmediatas a los partidos políticos para sanear una situación global que seis años después de que comenzara la crisis sigue siendo preocupante.

La cadena humana convocada por la Plataforma Gune, que reúne a personas en paro y sindicatos, reflejó desde la céntrica plaza de la Virgen Blanca hasta las puertas del Parlamento Vasco la indignación social ante la falta de respuestas a las demandas y la incapacidad de las fuerzas políticas para rebajar un índice de desempleo que en Euskadi y Navarra, pese a ser el más bajo del Estado, supera aún el 15%.

Los miembros de Gune que accedieron hasta las inmediaciones de la Cámara vasca no estuvieron solos. A las puertas del Parlamento, decenas de trabajadores de empresas con amenaza de despidos también se concentraron en este punto para trasladar sus reivindicaciones, megáfono en mano, a los aforados que dentro del edificio ponían sobre la mesas sus respectivas fórmulas para zanjar la delicada situación que padecen miles de familias vascas.

Entre estas firmas, los trabajadores de la planta vitoriana General Cable (antigua Cablenor) y de Candy, en Bergara, dos empresas cuyos máximos responsables han anunciado el cierre de ambas con la consiguiente destrucción de 143 y 150 puestos de trabajo, respectivamente.

Un reducido grupo de la plantilla de Bergara no se conformó con lanzar sus consignas desde el exterior del Parlamento y aprovechó la invitación cursada desde la bancada de EH Bildu para acceder al hemiciclo y, desde la tribuna reservada a invitados, interrumpir la sesión plenaria durante unos segundos para reivindicar la continuidad de su empresa. A requerimiento de la presidencia del Parlamento, en pocos segundos los servicios de seguridad de esta institución retiraron a estos trabajadores de las gradas.

En la entrada de la Cámara seguían esperándoles el resto de sus compañeros desplazados hasta la capital alavesa, además de una representación de la plantilla de la firma Condesa, con sede en Legutiano, que tras iniciar una marcha reivindicativa en la plaza de los Desamparados y realizar una breve parada enfrente de las oficinas de la empresa en la calle San Prudencio, finalizó su andadura frente al Parlamento Vasco.

Las movilizaciones continuarán hoy en la capital alavesa con la manifestación que de nuevo protagonizarán los trabajadores de General Cable a partir de las 18.00 horas en la plaza Bilbao.