Bilbao - El último accidente laboral mortal en el campus de Leioa ha reactivado el debate en torno a la subcontratación. Los sindicatos hace tiempo que denuncian el deterioro de las condiciones laborales que se está produciendo a causa de este fenómeno en la construcción, lo que provoca una menor seguridad. Sin embargo, según datos de Osalan, solo el 7,9% de los accidentes laborales producidos en 2013 los padecieron trabajadores de subcontratas, mientras que un 70% les ocurrieron a empleados contratados de manera directa. Sí es más clara la incidencia de la temporalidad, ya que uno de cada cuatro accidentes afectaron a personas que llevaban menos de seis meses trabajando.

El Instituto Vasco de Salud y Seguridad Laboral hizo públicos ayer los datos del año pasado, con un total de 30 operarios fallecidos, un 13,8% menos que en 2012, y algo más de 24.300 accidentes con baja, lo que supone cerca de un millar menos que el año anterior. Este descenso general de los accidentes tiene su reflejo en el índice de incidencia -número de accidentes por cada mil trabajadores- que también cae un 10%.

Estos números fueron valorados de manera positiva por el consejero de Empleo, Juan María Aburto, que señaló que su Departamento seguirá trabajando para lograr que el número de accidentes sea cero. El consejero indicó que, además de estos 30 operarios fallecidos, el año pasado se produjeron otros sucesos mortales que no entran dentro de las estadísticas de Osalan pero que sí son investigados por el instituto vasco, de manera que el total de fallecimientos ascendería a 46 -en este grupo entran fundamentalmente trabajadores fallecidos en la CAV de empresas de fuera del territorio-.

La siniestralidad prolonga así la tendencia a la baja que se inició en 2002, cuando el total de sucesos estaba por encima de 51.000, más del doble que el año pasado. Por sectores, cae la siniestralidad sobre todo en la construcción, cerca de un 18%, y lo hace más ligeramente en la industria y la agricultura, donde se concentran los accidentes de mayor gravedad. En los servicios se produjeron más accidentes el año pasado, la mayoría leves. Las lesiones más frecuentes en el trabajo son los esguinces, torceduras, y dislocaciones, el 40% del total.

En el apartado de las enfermedades laborales, crecen las que no causan baja como hipoacusias o musculoesqueléticas. La directora de Osalan, Izaskun Urien, señaló que el objetivo es que las enfermedades profesionales afloren para poder atajarlas, y dio cuenta de un aumento del 3% en las enfermedades detectadas.

Por tipo de contrato, dos terceras partes de los accidentes ocurrieron a trabajadores indefinidos, aunque en proporción la incidencia entre los temporales es más elevada. Es más, el 24,8% de los accidentes los sufrieron personas que llevaban menos de seis meses en su trabajo. En todo caso, los producidos a gente contratada por ETT fueron el 1,4%.

Osalan revela que el 7,9% de los accidentes del año pasado los sufrieron trabajadores subcontratados -1.921-, de manera que se produce un descenso en relación a 2012 -entonces fueron algo más de 2.000-, mientras que el 70% de los accidentados fueron contratados de forma directa -el resto son contratos de ETT y no asalariados, sobre todo autónomos-.

Son los hombres los que más padecen las consecuencias de la falta de seguridad. Casi 48 de cada mil hombres sufrió un accidente, mientras que en el caso de las mujeres son 20 de cada mil, debido en parte al tipo de trabajo que desempeñan ellos, generalmente más presentes en industria y construcción. Las trabajadoras sufren más accidentes in itinere, es decir, en el trayecto al trabajo.

"Se maquillan" LAB aseguró que las cifras de accidentes laborales "se maquillan", y achacó el descenso a la bajada de la actividad en industria y construcción. El sindicato acusó a Aburto de "no decir la verdad", y afirmó que el índice de incidencia es un indicador "totalmente limitado", ya que no diferencia el numero de horas trabajadas, es decir, al contabilizar un trabajador no se diferencia "entre si trabaja una hora u ocho".