Bilbao - La Caixa celebrará hoy su última asamblea como caja de ahorros y pondrá punto y seguido a una historia de más de 110 años porque está previsto que se apruebe su transformación, obligatoria por la ley, en nueva fundación bancaria. La entidad financiera catalana será así la primera caja de ahorros que dé el paso y adecue su estatus a la ley de cajas y fundaciones bancarias aprobada el pasado diciembre.
El orden del día incorpora la determinación de la dotación inicial de la fundación bancaria, fijada en 5.868 millones de euros. Esa cantidad convertirá a La Caixa en una de las mayores fundaciones europeas, la mayor de Europa Continental. Además, tendrá un patrimonio neto que asciende a 10.780 millones de euros.
La nueva fundación bancaria se encargará de la gestión de la Obra Social, que este año estará de nuevo dotada con 500 millones de euros. La asamblea también aprobará el traspaso a favor de Criteria CaixaHolding -una empresa de la que La Caixa es propietaria al 100% y que gestiona las participaciones industriales de la caja- de la participación de La Caixa en Caixabank. De ese modo la fundación bancaria pasará a ostentar su participación en el banco y en los instrumentos de deuda de los que La Caixa es emisor a través de Criteria y no lo hará directamente. Esa medida no influirá a la hora de dotar un fondo de reserva, tal y como requiere la ley a las fundaciones con más de un 30% de las acciones de un banco, como es el caso de la entidad catalana que tenía el 60,5% de Caixabank según datos marzo.
La reunión de hoy también acogerá la aprobación de los nuevos estatutos y del patronato, que será su máximo órgano de gobierno y estará compuesto por 15 miembros, entre ellos el presidente de Abertis, Salvador Alemany, el presidente de Telefónica, César Alierta, y el presidente de Grupo Financiero Inbursa, Carlos Slim.