bilbao. La Diputación de Bizkaia aprobará el próximo martes el proyecto de norma foral que permitirá que la planta de Edesa en Basauri continúe abierta y la línea de avales estará activa previsiblemente antes de que finalice este mes. La norma se tramitará por la vía urgente, lo que supone reducir automáticamente a la mitad el plazo de en torno a un mes que transcurre desde que se registra el proyecto hasta que se vota. En este caso se está realizando además un importante trabajo previo con los grupos de las Juntas Generales para acelerar el proceso y es posible que la tramitación sea incluso inferior a los quince días. A partir de ahí, una vez formalizados los avales será la dirección de Edesa la que decida cuándo pone de nuevo en marcha la fábrica. Su intención es hacerlo lo antes posible, aunque todavía no es posible fijar una fecha aproximada.
Son los plazos lógicos del rescate de la única pieza del Grupo Fagor que se salva de la quema, aunque la firma de electrodomésticos sembró ayer incertidumbre en torno a la solución para Edesa por su resistencia a confirmar el acuerdo con la Diputación vizcaína.
El director general de Fagor, Sergio Treviño, fue el encargado de dar luz verde el miércoles a la propuesta que le trasladó José Luis Bilbao durante la reunión que había convocado el Gobierno Vasco. También se comprometió a levantar ayer el preconcurso de acreedores para técnicamente separar a Edesa del proceso de liquidación del resto del grupo. El caso es que Treviño se desplazó a París para presentar el concurso de acreedores de la filial francesa y no se modificó la situación de la firma vizcaína porque debe ser el propio director general quien traslade la propuesta al consejo rector, el máximo órgano directivo de la cooperativa.
incertidumbre en la plantilla Además, los portavoces oficiales de Fagor insistieron a lo largo de la jornada en manifestar que no se había tomado todavía una decisión y que apenas se estaba estudiando la propuesta de Bizkaia. Una actitud que ilustra la tensión que se vive en el seno del máximo símbolo industrial del gigante del cooperativismo vasco horas antes de su caída.
En cambio, Treviño trasladó otro mensaje bien diferente a la Diputación, que se puso en contacto con él en Francia ante las dudas que se generaban desde Arrasate. Según el director general de Fagor, el acuerdo está cerrado y el preconcurso se levantará hoy antes de que se presente la propuesta de liquidación del resto de la compañía en un juzgado de Donostia. El consejo rector aprobará el rescate a las 8.00 horas y ahí empezará a correr de nuevo el reloj para Edesa.
Las informaciones contradictorias generaron incertidumbre en la plantilla de Edesa, que saltó el miércoles de la desolación a la alegría en unas horas y que vio un día después como se desdibujaba el camino hacia la salvación de la empresa. Los trabajadores continuarán su encierro en la fábrica de Basauri hasta que disipen las nubes, hasta que la dirección les llame para "volver a trabajar".
Pese a esas dudas, Bizkaia mantiene el plan y está convencida de que se materializará el rescate. Por ello, trabajó a lo largo del día de ayer en la elaboración de la norma foral, que requiere del encaje de actuaciones de varios departamentos para reforzar su armazón jurídica. La asistencia financiera tendrá que pasar el filtro de Bruselas y respetar las pautas marcadas por la Ley Concursal para el cobro por parte de los acreedores.
En el plano estríctamente político, Jose Luis Bilbao se reunió con los portavoces de los cuatro partidos representados en Juntas, PNV, Bildu, PSE y PP, a los que ya informó el miércoles por teléfono. El objetivo prioritario es agilizar la tramitación parlamentaria de la norma y en líneas generales encontró buena disposición. Además se comprometió a informar de todos los pasos que se den y se celebrará un nuevo encuentro el próximo lunes para que conozcan el proyecto antes de su aprobación en consejo de Gobierno.
La línea de avales de tres millones para Edesa se ha convertido en un tema prioritario para la Diputación, porque la inyección económica es clave para que la fábrica de Basauri recupere el pulso. Hasta el momento en el que el dinero llegue a la caja de la compañía no será posible fijar una fecha aproximada para la vuelta a la actividad, pero una vez materializada la asistencia el proceso de reapertura será relativamente rápido.
A partir de entonces habrá que definir un plan industrial para relanzar el proyecto. La norma foral ya establecerá algunas pautas generales marcadas en las conversaciones que mantiene la Diputación con la dirección de la empresa, pero el nuevo camino se pavimentará los próximos meses.